Mensaje de monseñor Manuel Eugenio Salazar
¡Algunos en este país, sostienen que son cosas apartes!
¡No es este país lo que es: gracias a que fue fundado y sostenido por valores cristianos!
¡Que ignorancia sociológica más grande!
Pedirnos a los creyentes de cualquier religión: no mezclar política y religión, ¡es como pedirnos quitarnos el alma y dejar sólo el cuerpo!
¡Quitarle la sabia vital a los árboles!
Es un imposible.
Es como decirle a un niño: ¡deje de amar a papá y sólo ame a mamá!
El ser humano es uno: integral, no se puede fragmentar.
El piensa y actúa con todo lo que es y es un ser espiritual, religioso.
Ni el marxismo ha podido quitarle a los ciudadanos su dimensión religiosa, porque es esencial al hombre.
¡Que curioso: los creyentes no podemos, pero los no creyentes sí pueden mezclar política con sus ideologías! Eso no es justo.
Los cristianos hablaremos y actuaremos en política: como cristianos, no podemos hacerlo de otra manera y es nuestro derecho humano elemental hacerlo.
No existe un Estado neutro, porque científicamente la neutralidad pura no existe.
El Estado está al servicio del pueblo y el pueblo no es neutro.
En Costa Rica, la mayoría de los ciudadanos cree en Dios y los cristianos (católicos y evangélicos) somos muchos.
Sí: la religión y la política se deben mezclar, para el bien común. Para construir la civilización del amor. Para una sociedad más justa y humana.
Sostener lo contrario: ¡no es científico, no es racional, atenta contra los derechos humanos!
+Monseñor Manuel Salazar.
Bendiciones.
