• Proyecto de ley presentado por el ministro Luis Amador no solo demuestra improvisación sino también desconsideración hacia la ciudadanía.
La fracción en pleno del Frente Amplio anunció hoy su completo desacuerdo y oposición a la pretensión del gobierno de que se apruebe un mecanismo para cobrar a las personas choferes para que puedan circular en el casco central josefino.
La iniciativa denominada “pago por congestionamiento”, fue dada a conocer hoy por el Ministro de Obras Públicas y Transportes, Luis Amador, y pretende reemplazar a la actual restricción vehicular que rige en la actualidad.
La excusa para este cobro que propone el Gobierno es que con los recursos se financiaría el Tren Rápido de Pasajeros.
Para la fracción frenteamplista, la idea no solo es una ocurrencia, sino que demuestra una vez más que la actual Administración no le importa cargar con más cobros a la clase media y a sectores más vulnerables, pese al aumento en el costo de la vida y la desigualdad rampante.
“El mismo Gobierno que apoya que el proyecto para habilitar que sigan circulando buses en mal estado, en lugar de ofrecer antes mejoras sustanciales en el transporte público, para facilitar a las personas ir a sus trabajos, hogares, centros de estudios y otros, lo que proponen es cobrar una especie de impuesto por entrar a la ciudad de San José.”, recordó la jefa de fracción del Frente Amplio, Sofía Guillén.
La propuesta de ley que pretende impulsar el Gobierno va de la mano con la idea de establecer nuevos peajes en rutas en la zona sur y en el Pacífico Norte, por ejemplo, el tramo Cañas-Limonal, en la Interamericana Norte.
“El Frente Amplio confirma su oposición a esta ocurrencia. Cobrarle a las personas trabajadoras y a la ciudadanía en general, por verse en muchísimos casos en la necesidad de venir a San José en carro por no contar con buenos servicios de transporte público, es una idea profundamente injusta”, concluyó la legisladora frenteamplista.
