El presidente de la República, Rodrigo Chaves, expresó recientemente su frustración con la falta de apoyo y los constantes bloqueos por parte de algunos diputados a los proyectos de ley que ha enviado al Congreso.
En una intervención pública, Chaves ayer no ocultó su descontento al afirmar que ya está “cansado” de hacer esfuerzos para impulsar iniciativas legislativas que, finalmente, no son aprobadas debido a las diferencias políticas y los constantes enfrentamientos entre legisladores.
El mandatario calificó estas peleas internas como “vergonzosas”, refiriéndose a la falta de capacidad para llegar a acuerdos que beneficien al país.
Chaves comentó que, tras varios intentos fallidos de conseguir el apoyo necesario en la Asamblea Legislativa, está revaluando la selección de su equipo de trabajo, en especial la del ministro de la Presidencia, que juega un papel clave en la relación entre el Ejecutivo y el Legislativo.
No obstante, dejó claro que su confianza en la posibilidad de negociar con ciertos diputados se ha visto seriamente mermada.
Según sus palabras, algunos legisladores han demostrado una actitud obstinada, lo que dificulta cualquier tipo de entendimiento para la aprobación de proyectos que el gobierno considera fundamentales.
El presidente también subrayó que, a pesar de su esfuerzo por buscar consensos, la dinámica política actual, marcada por la polarización y la confrontación entre los distintos bloques parlamentarios, hace que sea cada vez más difícil avanzar con propuestas que mejoren la situación económica y social del país.
A este respecto, mencionó que los constantes bloqueos por parte de algunos diputados están perjudicando no solo la gestión del gobierno, sino también el bienestar de los ciudadanos, quienes esperan soluciones concretas a los problemas más urgentes.
El tono de Chaves reflejó una mezcla de frustración y resignación ante lo que él percibe como un obstáculo insuperable para avanzar con su agenda política. A pesar de las dificultades, dejó claro que su gobierno sigue comprometido con la búsqueda de soluciones para el país, aunque reconoció que las condiciones actuales complican este proceso. La relación entre el Ejecutivo y el Legislativo parece estar en un punto crítico, y se espera que este pronunciamiento del presidente genere más debate sobre la situación política en Costa Rica.