¿Cómo se elige el Cardenal Camarlengo y cuáles son sus funciones?

¿Quién es el Cardenal Camarlengo y cuáles son sus funciones?

En los momentos de transición en la Iglesia Católica, una figura clave emerge: el Cardenal Camarlengo. Su papel, aunque discreto para muchos, es fundamental para garantizar la continuidad y el orden dentro del Vaticano tras la muerte o renuncia de un Papa.

¿Qué funciones tiene el Cardenal Camarlengo?

El Camarlengo asume la administración de la Iglesia durante el período conocido como Sede Vacante, es decir, cuando no hay un Papa en funciones. Su responsabilidad principal es verificar oficialmente la muerte del Pontífice, un acto que realiza con un protocolo específico, incluyendo la llamada al Papa por su nombre de bautismo y, tras confirmar su fallecimiento, el sellado de sus aposentos.

Además, el Camarlengo administra los bienes temporales de la Iglesia durante el interregno, supervisando todo el patrimonio del Vaticano con la ayuda de tres cardenales asistentes elegidos por el Colegio Cardenalicio. También organiza los funerales del Papa y prepara el cónclave en el que se elegirá al nuevo Pontífice, aunque no influye directamente en la elección.

¿Cómo se elige al Cardenal Camarlengo?

El Camarlengo es nombrado directamente por el Papa en funciones. No existe un procedimiento de elección entre los cardenales, sino que es una designación papal. El Pontífice puede escoger a cualquier cardenal de la Iglesia, aunque usualmente se opta por un purpurado con amplia experiencia en la administración vaticana.

¿Cuál es el origen de este puesto?

El título de Camarlengo tiene su raíz en el término medieval “camerarius”, que significa “encargado de la cámara” o “tesorero”. En sus inicios, el Camarlengo era el responsable de la gestión económica de la Santa Sede. Con el tiempo, especialmente durante el período en que los Papas residían en Aviñón (siglo XIV), sus funciones se ampliaron para incluir la administración general durante la vacancia papal, un rol que mantiene hasta hoy.

La importancia histórica de este cargo radica en su capacidad para asegurar que la estructura de la Iglesia permanezca funcional en uno de los momentos más delicados de su vida institucional.


El cardenal camarlengo, Kevin Farrell, ha presidido este viernes la ceremonia del cierre del féretro del papa Francisco, que forma parte de las tres celebraciones con las que será despedido el obispo de Roma fallecido el lunes a los 88 años: cierre del féretro, misa de funeral e inhumación. Durante el rito se ha colocado un velo de seda blanca sobre el rostro del difunto que simboliza el paso a la vida eterna.

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