Pese a tener 2 tipos de cáncer, picazón y depresión, Celso deberá seguir en La Reforma

San José, 27 de junio de 2025 — Ni el cáncer, ni la depresión, ni la supuesta picazón constante lograron convencer a las autoridades penitenciarias de que el exmagistrado Celso Gamboa Sánchez debía ser trasladado a una cárcel de menor seguridad. Su solicitud para ser reubicado en el centro penal Cocorí, en Cartago, fue rechazada por el Ministerio de Justicia y Paz, y se le ordenó continuar en el módulo de máxima contención de La Reforma.

Gamboa, quien enfrenta un proceso de extradición solicitado por Estados Unidos por su presunta vinculación con una red internacional de narcotráfico, alegó tener más de diez padecimientos médicos que, según él, empeoran con las condiciones de su actual confinamiento. Entre las enfermedades que reportó están cáncer de colon y de piel, hipertensión, trastornos depresivos, migrañas, problemas circulatorios y varios males dermatológicos.

Diagnóstico no convenció

La Dirección General de Adaptación Social concluyó que su estado clínico no justifica una modificación en su régimen de seguridad. Según el informe oficial, las evaluaciones médicas y penitenciarias determinaron que no hay condiciones que ameriten su traslado. A esto se suma el perfil delictivo del exfuncionario, el riesgo de fuga y la gravedad del proceso judicial que enfrenta.

Desde el Ministerio también recalcaron que el módulo en el que se encuentra permite el seguimiento médico y psicológico adecuado, y que en caso de requerir tratamientos más especializados, Gamboa puede ser trasladado temporalmente a centros médicos bajo custodia, sin poner en riesgo su seguridad ni la del sistema penitenciario.

El catálogo de dolencias

En su gestión para salir de máxima seguridad, Gamboa alegó sufrir:

  • Cáncer de colon
  • Cáncer de piel
  • Hipertensión arterial
  • Depresión severa
  • Trastornos circulatorios
  • Migrañas crónicas
  • Problemas dermatológicos persistentes
  • Insomnio, entre otros

A pesar de ese diagnóstico autodeclarado, las autoridades desestimaron su solicitud, señalando que su situación no compromete su integridad física ni requiere un entorno carcelario diferente.

Caso sigue generando polémica

Gamboa fue arrestado recientemente como parte de una investigación liderada por la DEA, que lo relaciona con una supuesta organización criminal transnacional. Desde su detención, ha intentado sin éxito modificar sus condiciones de encierro mediante distintos recursos legales.

El caso ha provocado un fuerte remezón en la política y el sistema judicial de Costa Rica, debido al alto perfil que durante años tuvo Gamboa como exfiscal adjunto y exmagistrado de la Sala Tercera del Poder Judicial. Ahora, permanece bajo vigilancia extrema en La Reforma, mientras se define su futuro ante las autoridades judiciales y su posible extradición a suelo estadounidense.