San José, 24 de julio de 2025 – El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) aprobó una nueva distribución de curules legislativas por provincia, la cual se aplicará en los comicios presidenciales y legislativos del 2026. La decisión se adoptó durante la sesión ordinaria número 60-2025 del órgano electoral.
La reasignación se fundamenta en las proyecciones poblacionales elaboradas por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), a falta de un censo con cobertura plena. Aunque el Censo Nacional del 2022 presentó limitaciones en su alcance, el INEC complementó los resultados con registros administrativos para generar una estimación actualizada y confiable de la población por provincia.
Esta medida responde al mandato del artículo 106 de la Constitución Política, el cual ordena que la distribución de escaños en la Asamblea Legislativa sea revisada tras cada censo nacional. Dado que el último censo con cobertura total se realizó en 2011, y que las condiciones del estudio de 2022 no permitieron su uso directo, el TSE recurrió a las estimaciones más recientes y detalladas disponibles, publicadas en 2023.
Representación ajustada al crecimiento poblacional
El nuevo reparto de diputaciones refleja las variaciones en la distribución demográfica del país durante la última década. Provincias con mayor crecimiento poblacional ganarán representación, mientras que otras podrían mantener o incluso reducir su número de curules, en busca de un balance justo entre habitantes y representantes.
Aunque el detalle numérico de la distribución aún no ha sido publicado en el acuerdo oficial del TSE, se espera que San José, Alajuela y Heredia conserven una parte importante de los escaños por ser las provincias con mayor concentración poblacional.
Confianza en los datos del INEC
El Tribunal respaldó la confiabilidad de los datos utilizados, al señalar que el INEC, como órgano técnico rector en materia estadística según la Ley 9694, ofrece estimaciones válidas para tomar decisiones de política pública, planificación institucional y procesos electorales.
De no haberse realizado esta actualización, el país habría mantenido una estructura de representación desfasada respecto a su realidad demográfica, lo que afectaría el principio de equidad en la representación legislativa.
El TSE reitera que esta medida garantiza que cada voto tenga un peso más proporcional en las elecciones de 2026, en concordancia con el crecimiento y desplazamiento poblacional que ha experimentado el país en los últimos años.
