Una nueva tragedia sacude las rutas migratorias hacia la península arábiga. Al menos 68 personas migrantes de origen africano fallecieron y alrededor de 74 permanecen desaparecidas tras el naufragio de una embarcación ocurrido el domingo frente a la costa de Yemen.
El director de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Yemen, Abdusattor Esoev, confirmó que en la embarcación viajaban 154 personas, entre refugiados y migrantes, cuando ocurrió el siniestro.
Las autoridades continúan las labores de búsqueda y rescate, aunque se teme que el número de víctimas fatales aumente en las próximas horas. El naufragio se suma a una larga lista de tragedias que evidencian los riesgos extremos que enfrentan miles de personas en su intento por escapar de la pobreza, la violencia o los conflictos en sus países de origen.
La OIM ha reiterado su llamado a la comunidad internacional para reforzar las vías seguras y legales de migración y proteger la vida de quienes, por desesperación, recurren a rutas peligrosas y redes de tráfico humano.
