Las declaraciones del presidente Rodrigo Chaves sobre el caso del director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Randall Zúñiga, generaron una oleada de críticas en redes sociales y entre distintos sectores, que lo acusan de tomar partido en una investigación aún en curso.
Durante su conferencia de prensa del miércoles, el mandatario expresó sentirse “profundamente triste e indignado” por la denuncia de presunta violación contra Zúñiga, y cuestionó la imagen del Poder Judicial, afirmando que la situación lo llenaba de consternación.
Sin embargo, para muchos usuarios en redes, el presidente “juzgó y sentenció” al funcionario sin que exista todavía una resolución judicial. Algunos calificaron sus declaraciones como una intromisión en la independencia de los poderes.
Fiscalía responde y defiende objetividad del proceso
El Fiscal General de la República, Carlo Díaz, reaccionó poco después y defendió la independencia y objetividad con que se lleva adelante la investigación. Calificó los señalamientos del presidente como “malintencionados” y aseguró que el caso se maneja con rigurosidad técnica y sensibilidad hacia la víctima.
“Reitero que todas las diligencias han sido ejecutadas por personal especializado, brindando una atención acorde con la condición de vulnerabilidad de la víctima”, declaró Díaz.
El jerarca también aclaró que la investigación cuenta con colaboración de la Unidad de Género del OIJ, pero bajo la dirección funcional exclusiva de la Fiscalía Adjunta de Género, para garantizar la transparencia del proceso.
Tensión entre poderes
El cruce de declaraciones entre el presidente y el Fiscal General refleja una creciente tensión institucional entre el Poder Ejecutivo y el Judicial, justo cuando la Corte Plena decidió suspender preventivamente a Zúñiga por 15 días hábiles.
El caso se ha convertido en uno de los temas más sensibles del momento, con un fuerte impacto político y judicial que sigue generando debate público en todo el país.
