Por: Luis Fernando Méndez Molina. escritor sancarleño
Un día, muy normal ya hace 78 años en San Carlos un 21 de mayo del año 1943, una avioneta T.I. 45 que salió con cinco personas, desde Marina, de San Carlos se decía que era desde Pital, cargado de quesos, natillas, y equipaje de los pasajeros iban hacia la Capital San José, la sabana Campo de aterrizaje de la Capital.
Según algunas narraciones de gentes de la época del pueblo Marsella, que se desconoce que sucedió con precisión, para haberse accidentado, se decía en apariencia la avioneta toco la copa de árbol Cedro muy alto, el cual se descontrolo, la avioneta y piloto perdió el control cayendo al precipicio de la montaña, en un bosque nuboso, lluvioso cerca del Río Barroso un afluente del Toro Amarillo, en las frescas y frías alturas de Marsella.
Murieron cuatro personas, entre ellos iba Rufino Quesada Hidalgo, de Venecia a sus 33 años de edad falleció en el lugar, hijo de Manuel Quesada Quesada y Pacífica Hidalgo Quesada, la esposa de Rufino fue Deisy González Fernández , y el único sobreviviente fue un extranjero de Estados Unidos, un gringo. Un señor llamado Otoniel Cordero Araya quien vio en la altura único vecino de Moisés, quien escucho el accidente, él vivía allá en la altura, y siempre andaba monteando, zainos, se dirigió a ver si le llegaba donde había sido el accidente, de la avioneta allá en la montaña .
El pasajero único extranjero sobreviviente, con golpes y fracturado un pie. El mismo se entablillo, estaba consiente, desorientado, empezó a caminar en busca algún lugar, poblado para que le ayudaran, (a los alrededores talvez miro montaña abajo humo), donde antes y las únicas familias más cercanos cocinaban con leña, pero fue una persona con mucha disciplina, buen control de sí mismo y estaba muy sediento de la caminata, nunca perdió su esperanza de llegar a algún lado para que le ayudaran.
El único sobreviviente iba poniendo señas, para luego llegar a buscar a los demás personas accidentadas, este extranjero camino por lo menos cinco kilómetros en descenso a la montaña, cuando se topó, a Otoniel Cordero Araya, andaba un saco, el cual le metió dos varillas fuertes dentro el saco, y el extranjero se puso sobre el saco para ser traslado arrastrado a su rancho a esperar, allí estaba el joven Beto Mejías Vásquez de Marsella centro, trabajando cerca del rancho , Otoniel le dijo que bajara a avisar a Marsella centro, Beto inmediatamente se fue, era como una hora o más a pie a llegar a Marsella, le aviso a Juan Luis Molina Rojas, que fuera a de Rio Cuarto, a caballo yéndose por el puente antiguo (Hoy) callecita de piedra y camino antiguo de Marsella hacia el cruce y luego a rio cuarto y al llegar a una planicie provisional de aterrizaje conto, lo sucedido a Mesías Campos que trabajaba allí , que habían encontrado un extranjero accidentado, de la avioneta de la Marina para que avisaran a San José.
Para este año 1943 ir hacia la altura Paraíso de Marsella no existían camino, solamente un trillo de camino de muchos barriales solo para andar a caballo oh en una yunta de bueyes con carreta, había un montón de dificultades para subir hacia la altura y una extensa y largo camino. Allá en la altura vivía Moisés Molina Sánchez y su esposa Luisa Rojas Sánchez, Otoniel Cordero Araya y su esposa y algunos hijos de Moisés, vivían en ranchos con hojas de palmera y madera redonda y se alimentaban de animales: Chancho de Monte, Pavas, Gongo, conejos de monte, tepezcuintle y venado. Los fallecidos Fueron luego encontrados por las señas que había dejado el extranjero y traídos en una yunta de bueyes y la carreta, por muchas personas entrevistadas no me dieron razón quienes fueron los otros nombres y apellidos de los otros y investigue en Aviación civil no hay registro tampoco.
Luego de haber llevado más gente para el rescate de todos los fallecidos y levantar los cuerpos y trasladarlos a Marsella centro, le pidieron a la señora Doña Inés Quesada Hidalgo, Hermana de Rufino que por favor les rezara a los difuntos un rosario por sus benditas animas en su casa de habitación, ella con todo el dolor del alma de haber perdido a su hermano y demás personas aporto el rezo y oraciones.
Según los medios de La Nación hacen una breve Información en la fecha 17 julio 2018 en los registros de accidentes de aeronaves de Costa Rica.
El 21 de mayo del año 1943, desapareció una avioneta Matricula T.I.45 Taca era una Curtis travelair fabricada en Estados Unidos, personal de la sabana en san José hacían presumir que podría haber una tragedia por el retrasó de la avioneta, se analiza en un mapa tres lugares que pudo haber caído, El cañón toro Amarillo, Terrenos de la Patria, y en las faldas del volcán poas.
Antes del mediodía del 21 de mayo 1943 y proveniente de la Marina Aguas Zarcas, y se dirigían hacia la sabana de san José, campo de aterrizaje de la capital, los josefinos manejaban como un retrasó, sin importancia de la avioneta, el piloto un mexicano llamado Pablo Balbuena, mas cuatro pasajeros, uno de ellos fue Don Rufino Quesada Hidalgo de Venecia.
El día 27 de mayo 1943, es encontrado y topado un sobreviviente un extranjero de Estados Unidos llegando a una finca cerca de la montaña, el extranjero narra lo siguiente, tuve que esperar mas de un día que acabara la gran tormenta y lluvia, caminé varios días entre la montaña hasta llegar afuera de la montaña a una finca, que luego fue ayudado por un hombre llevado a un rancho.
Cuenta el extranjero lo que sucedió, que causa pudo ser sobre peso, natillas y quesos y equipajes, mas la tormenta lluvia y viento, que el piloto perdiera el control de la avioneta pequeña travelaire.
Derechos de Autor y escritor.
Luis Fernando Méndez Molina.
Libro; Nuestras Raíces Marsella de Venecia.