Hoy 24 de noviembre es el «Día de Acción de Gracias», festividad laica poco celebrada en el país

El Día de Acción de Gracias es una fiesta nacional celebrada en Canadá, Estados Unidos, Granada, Santa Lucía, Liberia y Costa Rica. Originalmente, fue un día de agradecimiento por la cosecha y por el año anterior. En Alemania, Rusia y Japón se conmemoran festividades similares de fin de año.

Es creencia popular que su tradiciónse remonta al año 1621, cuando los primeros colonos ingleses en América del Norte se reunieron para celebrar su primera cosecha y dar gracias a Dios. En esa celebración en Plymouth aparecieron unos indios Wampanoag que comieron y bebieron junto a los colonos. Pero como todos los mitos fundacionales, muy pocas de estas cosas son verdad, y la fiesta tal como ahora se conoce información más bien del siglo XIX, detalla el medio INFOBAE.

El día de Acción de Gracias se celebraba en fechas distintas del otoño según los estados, y su proclamación como fiesta nacional estadounidense a celebrarse el último jueves de cada noviembre se debe a Abraham Lincoln en 1863. Aunque la proclamación se hizo durante la Guerra de Secesión y pudo haber sido un fracaso entre los rebeldes sureños, pronto se convirtió en una de las fiestas compartidas por todos los americanos.

Celebración laíca

Al contrario que la Navidad, la otra gran fiesta seguida en Estados Unidos como en todo el mundo de cultura cristiana, el día de Acción de Gracias tiene un carácter transversal a todas las religiones que se practican en el país. La celebran cristianos de todas las tendencias, judíos, musulmanes y aún laicos o ateos. No hay en ese día ninguna ceremonia religiosa asociada a la fiesta.

El día siguiente al de Acción de Gracias es el archifamoso Black Friday, el día en el que las tiendas anuncian generosos descuentos y los clientes toman por asalto los grandes almacenes, aunque las compras por internet han atenuado ese fenómeno. Es, curiosamente, la única de las tradiciones asociadas al Thanksgiving que ha traspasado fronteras para convertirse en un fenómeno mundial.