¡Trato pero es difícil!

Comentario del periodista José Luis Valverde Morales

Por salud mental, consejo de amigos, la voz interior, ese Pepe Grillo instigador de la conciencia, he procurado alejarme de la polémica por el quehacer del actual gobierno.

Desde joven, conjuntamente con mi pareja, asumimos sacrificios para tener paz en la cumbre de la existencia.

Como persona no debería importarme, no obstante; un día decidí acudir a las aulas en procura de entendimiento.

A veces la ignorancia o el desconocimiento traen sosiego, a fin de cuentas, el mundo es cada uno en el metro cuadrado de la vida.

ENTRAÑAS DEL PODER.
Conocí el poder desde sus entrañas, por algo le dicen “la erótica”, quien lo prueba se resiste a dejar el vicio de sentirse el centro del universo, muchos deambulan con su pasado a cuestas, probaron las mieles, se fueron para no volver, pero les quedó gustando.

Pueden creerme o no, pero al actual mandatario, contrario a sus predecesores, ni siquiera lo he visto personalmente, me guio por sus palabras y actos, la concordancia entre el decir y el hacer.

Es fácil convencer con el verbo, todo es distinto cuando la realidad revienta día a día en la cara.

¡Arroz más barato! Los pequeños productores salieron despavoridos, los grandes resisten, los importadores, sin haberse fregado en el campo, sonríen al mirar crecer sus arcas.

¡Medicamentos a bajo precio! Ruego encarecidamente me digan dónde, a no ser en España, México o Nicaragua.

Apagón educativo, la luz ofrecida, regalar títulos a diestra y siniestra, mientras las instalaciones de los centros educativos continúan su lento e inexorable deterioro.

En materia de salud, presea histórica, los troles a sueldo tratan de sostener la destartalada imagen de un edifico donde se albergaron grandes conocedores de la ciencia: Solón Nuñez Frutos, Antonio Peña Chavarría, Raúl Blanco Cervantes, Carlos Sáenz Herrera, Max Terán Valls, Juan Jaramillo Antillón, para mencionar los más lejanos, esquivar críticas de quienes se parapetan en colores partidarios.

LE DESEO LO MEJOR.
He expresado hasta la saciedad el deseo del bienestar del actual gobierno, a la distancia observo hígado enfermo, corazón revanchista, mente perturbada, oídos sordos, manos justicieras al margen de la justicia, pies disparando patadas a quien ose pensar diferente, codos salidos en contraposición al juego limpio, ego henchido, verbo encendido para inflamar la llama de los desposeídos, quienes siguen más jodidos.

El costo de la vida en ascensor, mientras salarios, ingresos, pensiones de invalidez, vejez y muerte, además de las no contributivas, subiendo con los pies a rastras por las gradas del no alcanza.

ME ENCANTARÍA.
Me encantaría aplaudir las acciones de un gran estadista, los tuvimos en el pasado, pensemos de Manuel Mora Valverde, Rafael Ángel Calderón Guardia, Víctor Manuel Sanabria Martínez hacía atrás, para no despertar insanos pensamientos.

Como jubilado del régimen de Invalidez, Vejez y Muerte de la Caja Costarricense de Seguro Social, deseo disfrutar la placidez de los años, las travesuras de los nietos, la contemplación del mar, lagos, ríos, caminos, veredas, describir esos hermosos regalos de la existencia.

Como periodista profesional, aún retirado del corre corre cotidiano, influenciado por grandes pensadores dentro y fuera del terruño, como ser humano agradecido con las oportunidades de la vida, no olvido un día fui repartidor de leche por el barrio, recolector de café, cuidador de casas, entre otros honrosos menesteres.

Aunque trato, se me hace difícil guardar silencio, mientras contemplo como se quedan sin provisiones las casas de los pobres, en tanto se llenan las arcas de los más favorecidos.

José Luis Valverde Morales.