El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, anunció el lunes que ha ordenado el bloqueo total de la Franja de Gaza en medio de un conflicto entre Israel y el grupo terrorista Hamás. Esta medida implica que el enclave palestino quedará sin suministro de electricidad, alimentos y combustible.
En un comunicado emitido por su oficina, el ministro declaró: «He dado una orden: Gaza estará bajo un cierre total. Estamos luchando contra terroristas bárbaros y responderemos en consecuencia». Gallant enfatizó que no se permitirá el flujo de electricidad, alimentos ni combustible desde Israel hacia la Franja.
Es importante mencionar que Israel mantiene un bloqueo integral por aire, tierra y mar sobre la Franja de Gaza desde 2007, cuando Hamás asumió el control del enclave, que cuenta con una población de 2,2 millones de habitantes y depende de la central eléctrica única que necesita combustible para abastecer hospitales, viviendas y refugios.
La escalada del conflicto se desató después de que Hamás lanzara un ataque sin precedentes por tierra, mar y aire, tomando a Israel por sorpresa con miles de cohetes y incursiones terrestres de milicianos en territorio israelí, donde se produjeron bajas significativas y secuestros de ciudadanos israelíes.
En respuesta, Israel ha llevado a cabo intensos bombardeos sobre la Franja de Gaza, donde residen 2,3 millones de gazatíes, con un impacto en ocasiones indiscriminado.
Tras dos días de conflicto, se reportan más de 700 muertes y más de 2,200 heridos en Israel, mientras que en la Franja de Gaza se registran al menos 493 muertes, incluyendo 91 niños, y 2,751 heridos, incluyendo 244 menores.
La organización Human Rights Watch denunció que tanto Israel como Hamás están incumpliendo sus obligaciones legales y describió las políticas israelíes en Gaza como un «castigo colectivo ilegal» que constituye un crimen de guerra.