Por Nicaragua Investiga
Exigen a las autoridades costarricenses que investiguen el asesinato del opositor nicaragüenses Jaime Luis Ortega Chavarría, ocurrido en Upala. Días antes del crimen, los sospechosos llegaron a su taller de artesanías y se hicieron pasar como clientes.
Las organizaciones opositoras en el exilio están exigiendo que se investigue el asesinato del opositor Jaime Luis Ortega Chavarría, de 54 años, ocurrido en Upala, Costa Rica, quien era solicitante de refugio desde 2018 y miembro de la Resistencia Nicaragüense.
“Exigimos una investigación ágil y exhaustiva para identificar a los responsables materiales e intelectuales de este crimen”, demandó este lunes la organización UNAMOS, antes Movimiento Renovador Sandinista (MRS). “La comunidad internacional debe estar alerta ante posibles acciones de persecución transnacional por parte del régimen de los Ortega Murillo”, añadieron.
Fue visitado días antes por presuntos asesinos
La hija del opositor relató a Confidencial que los asesinos lo habrían visitado en su casa fingiendo interés en su trabajo como artesano. Entraron a la vivienda a ver las piezas y Ortega Chavarría les dijo que lo llamaran por cualquier cosa, que él hacía artesanías grandes y pequeñas. Los hombres dijeron que le iba a encargar unas lapas grandes y que lo iban a llamar para decirle el tamaño que querían.
Los supuestos clientes regresaron a casa del artesano días después, se negaron a entrar y le dijeron al opositor que saliera para darle las medidas de las artesanías. “Él se fue a ver y parece que querían subirlo a la camioneta. Un hombre se bajó del vehículo y mi papá no se quiso subir por ese lado, iba dando la vuelta cuando le metieron cuatro balazos en la espalda”, explicó la hija del artesano a Confidencial.
Ortega Chavarría era originario del archipiélago de Solentiname, jurisdicción del municipio de San Carlos, en el departamento de Río San Juan, y tenía seis años de haber emigrado a Costa Rica, tras la persecución que inició desde 2018 contra opositores del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
“UNAMOS insta al Estado Costarricense y a la Oficina de Investigación Judicial (OIJ) a tomar medidas extraordinarias para proteger a los exiliados y opositores nicaragüenses en su territorio”, exigió la organización opositora.
Movimiento Campesino condena asesinato
El Movimiento Campesino a través de Medardo Mairena, reconocido líder campesino que fue preso político y ahora exiliado en Estados Unidos, condenó el asesinato del opositor y exigieron una investigación exhaustiva para descubrir a los responsables.
“Alertamos a las autoridades costarricenses y a la comunidad internacional que las características de este crimen tiene el perfil propio de un acto de terrorismo transnacional, característico del régimen sandinista de los Ortega-Murillo”, señalaron.
Los asesinatos de opositores
Rubén Loáisiga fue asesinado en 2019. El cadáver fue encontrado frente a una casa en el municipio de Pocosol de San Carlos, en el norte de Costa Rica, y desde entonces comenzaron los cuestionamientos sobre lo sucedido.
El gobierno del entonces presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, presentó “su más enérgica y rotunda protesta” ante Managua, por “las acciones de efectivos del Ejército de ese país” que, según las autoridades del vecino país, incursionaron en territorio costarricense y dieron muerte al joven nicaragüense.
En 2022, Rodolfo Rojas Cordero, de 65 años, uno de los líderes de los tranques de la protesta en Carazo, fue encontrado muerto cerca de carretera a Danlí, en Honduras, de manera sospechosa.
