No más alcahueterías en las cárceles: Justicia limita encomiendas, llamadas telefónicas, visitas familiares yconyugales a reos en máxima seguridad
• Solo recibirán lo básico y visitas de familia una vez al mes, visitas conyugales cada dos
meses, y podrán hablar por teléfono solo 10 minutos a la semana.
San José, 23 de abril del 2025. El Ministerio de Justicia y Paz anunció nuevas
reglas para privados de libertad recluidos en el Circuito de Alta Contención, lo que
se conoce como máxima seguridad.
Estas personas solo recibirán encomiendas una vez al mes y no todos los días y
solo artículos de primera necesidad.
Las visitas familiares pasan de todas las semanas a una vez al mes y las visitas
conyugales con vínculo demostrado pasan de una quincenal a una cada dos meses.
También, se establece un control más riguroso de los artículos que estos van a
poder recibir y poseer dentro del establecimiento penitenciario.
Con respecto a las llamadas telefónicas, se limitó a 10 minutos semanales en lugar
del libre acceso a teléfonos públicos.
El Ministro de Justicia y Paz, Gerald Campos Valverde señaló que este Gobierno
está cumpliendo con su deber de garantizar la correcta administración de las
cárceles y que el proceso de perfilamiento, clasificación y ubicación de personas
privadas de libertad es una tarea que debió ejecutarse desde hace muchos años.
“Estamos separando a las personas privadas de libertad según criterios técnicos,
criminológicos y de seguridad, lo que permite ubicar a quienes representan un alto
riesgo en espacios específicos con mayores condiciones de contención y control,
fortaleciendo la seguridad penitenciaria”, explicó el jerarca.
Como parte este proceso se reorganizo la distribución de la poblacion privada de
libertad para poder utilizar los módulos que cuentan con mejores condiciones de
seguridad y capacidad de respuesta policial logrando así una ampliación inicial de
1.000 espacios de alta seguridad, conformando un circuito de alta contención como
parte de la estrategia que ordena las cárceles del país.
Esta medida permite también optimizar la labor de la Policía Penitenciaria, los
cuales estaban cuidando a los privados en alcahueterías como la visita intima,
recibiendo encomiendas, las cuales eran aprovechadas para meter drogas,
celulares y objetos no permitidos. Ahora mediante un plan de seguridad especifico
esos policías podrán enfocarse mayormente en reforzar la vigilancia y control de los
privados de alto riesgo para la sociedad.
Se logra además que aquellos privados de libertad con perfiles para rehabilitación
cumplan su plan de atención y puedan generar las habilidades y condiciones
necesarias para insertarse por medio de ocupación laboral y sin dañar la sociedad,
la seguridad y la convivencia.
En paralelo, el Gobierno trabaja activamente en la construcción de una nueva cárcel
donde pueda trasladarse este circuito de alta contención con esos privados de alta
peligrosidad y lograr bajar el hacinamiento y desocupar algunos módulos para
hacerles las mejoras de infraestructura que requieran.