Un perro entrenado de la Policía de Control de Drogas (PCD) se convirtió esta mañana en el héroe de una operación antidrogas de alto impacto, al detectar un cargamento de cocaína escondido entre cajas de piñas que estaban listas para ser exportadas. El hallazgo se dio durante uno de los múltiples allanamientos ejecutados en el país como parte de la Operación Purga, una investigación internacional contra el narcotráfico.
La operación, liderada por la Fiscalía Adjunta contra la Delincuencia Organizada (FAEDO) y en estrecha coordinación con cuerpos policiales europeos, permitió intervenir más de 20 puntos estratégicos en diferentes provincias de Costa Rica. La droga detectada por el can policial tenía como destino los puertos de Limón, desde donde sería enviada a Europa camuflada en cargamentos de fruta.
Aunque las autoridades aún no han confirmado la cantidad exacta de cocaína incautada hoy, trascendió que la red está directamente vinculada con el decomiso de 1.8 toneladas en Costa Rica y otras 3.5 toneladas en puertos europeos en los últimos meses.
Este contundente golpe forma parte de una ofensiva sin precedentes que ha resultado también en la detención de al menos 25 personas en Europa, específicamente en España, Alemania, Países Bajos, Portugal y Bélgica. Las investigaciones apuntan a que se trata de una red criminal altamente estructurada, con conexiones logísticas y financieras transnacionales.
Las autoridades costarricenses destacaron el trabajo articulado entre agencias nacionales e internacionales, y subrayaron el papel clave que cumplen los agentes caninos en este tipo de operativos. El perro detector no solo logró dar con el cargamento escondido, sino que permitió reunir evidencia clave para judicializar a los responsables.
