En Costa Rica, muchas familias de ingresos medios o bajos sueñan con tener una casa propia, pero las limitaciones económicas dificultan ese anhelo. Consciente de esta realidad, el Estado impulsa el programa Bono-Crédito, una estrategia que combina la ayuda estatal con el acceso al crédito hipotecario para hacer realidad la adquisición o construcción de vivienda.
Este programa, gestionado por el Banco Hipotecario de la Vivienda (BANHVI) y ejecutado por entidades financieras autorizadas, representa una de las principales herramientas para fomentar el acceso a la vivienda digna para sectores que tradicionalmente han quedado rezagados del mercado inmobiliario.
¿En qué consiste el Bono-Crédito?
A diferencia del bono tradicional, destinado a familias en condición de pobreza extrema, el Bono-Crédito está enfocado en familias con ingresos medios que no califican para un bono completo, pero tampoco tienen capacidad económica para adquirir una vivienda por sus propios medios.
El mecanismo funciona de la siguiente manera:
- La familia interesada acude a una entidad financiera autorizada para gestionar un crédito hipotecario, con condiciones de tasa y plazo acordes al perfil de riesgo.
- Paralelamente, el BANHVI otorga un subsidio (bono de vivienda) proporcional al nivel de ingresos del núcleo familiar.
- Esta combinación permite reducir el monto a financiar mediante crédito y, por ende, facilita la aprobación y sostenibilidad del préstamo.
Requisitos para acceder al programa
Para optar por el Bono-Crédito, los interesados deben cumplir con ciertos requisitos establecidos por el BANHVI, tales como:
- Ingresos familiares dentro de los márgenes establecidos (generalmente hasta 8 salarios base).
- Cumplir con las condiciones socioeconómicas y no haber recibido previamente otro bono de vivienda.
- Acudir a una entidad financiera autorizada por el BANHVI (como bancos, mutuales o cooperativas), que evalúa la capacidad de endeudamiento y tramita el crédito hipotecario.
- Estar dispuestos a cumplir con todas las obligaciones del préstamo, como el pago mensual del crédito.
Monto y límites del financiamiento
El monto del bono varía en función del nivel de ingreso familiar, con un tope máximo de ¢9.300.000, el cual se destina exclusivamente a la compra o construcción de vivienda.
Por su parte, el crédito que complementa este bono debe respetar el tope de la vivienda de interés social, que es el máximo valor permitido por ley para las casas financiadas con este tipo de ayudas. Este monto se ajusta periódicamente conforme a los cambios económicos del país.
Impacto del Bono-Crédito
Según datos del BANHVI, el Bono-Crédito ha permitido que miles de familias que antes quedaban excluidas por su nivel de ingreso —demasiado alto para un bono total, pero insuficiente para una vivienda sin ayuda— puedan acceder a un hogar digno.
Además, este programa dinamiza el sector construcción, genera empleo, y reduce los niveles de pobreza habitacional, especialmente en zonas urbanas y rurales donde el acceso a vivienda adecuada sigue siendo limitado.
Un camino viable para las familias costarricenses
En tiempos donde la vivienda propia es un objetivo cada vez más difícil de alcanzar por el alto costo de los terrenos y materiales de construcción, el Bono-Crédito representa una opción viable y estratégica para aquellas familias que, aun teniendo ingresos formales, no logran cubrir el costo total de una casa.
Con el respaldo del Estado y la colaboración de las entidades financieras, esta iniciativa se consolida como un puente hacia la estabilidad y el bienestar familiar.
¿Cómo aplicar?
Los interesados pueden obtener más información y orientación directamente en las entidades financieras autorizadas o mediante el sitio web oficial del BANHVI: https://www.banhvi.fi.cr
