Dmitri Medvédev, ex presidente y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, lanzó una inquietante declaración tras el bombardeo estadounidense a instalaciones nucleares iraníes. Moscú acusa a Washington de violar el derecho internacional y alerta sobre una posible escalada global.
22 de junio, 2025 | Internacional
En un tono de creciente tensión, Rusia advirtió este domingo que “algunos países están listos para entregarle directamente armas nucleares a Irán”, una declaración que aumenta el nerviosismo en torno al conflicto que involucra a Teherán, Washington e Israel.
La afirmación fue realizada por Dmitri Medvédev, ex presidente ruso y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad, apenas horas después de que el mandatario estadounidense Donald Trump confirmara una serie de ataques de precisión contra tres instalaciones nucleares clave en Irán: Fordow, Natanz e Isfahan.
Una advertencia que escala el conflicto
A través de publicaciones en la red X y en Telegram, Medvédev arremetió contra la operación militar estadounidense, calificándola de ineficaz y potencialmente contraproducente. Aseguró que la infraestructura nuclear iraní habría sufrido solo “daños menores” y que, pese al ataque, “el proceso de enriquecimiento de uranio y la futura producción de armas nucleares seguirá adelante”.
En tono sarcástico, criticó duramente al presidente Trump por lo que consideró un giro radical respecto a su imagen internacional: “El ‘presidente de la paz’ ha metido a Estados Unidos en otra guerra. Que se olvide del Nobel”.
Condena oficial de Moscú
La Cancillería rusa emitió un comunicado oficial en el que calificó los bombardeos como “una violación grave del derecho internacional” y exigió el cese inmediato de la agresión. “El uso de misiles y bombas contra instalaciones dentro de un Estado soberano, sin aval del Consejo de Seguridad, constituye un acto irresponsable”, señaló el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso.
Moscú también criticó el papel de Estados Unidos como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU y pidió al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) una evaluación urgente de los daños en las instalaciones nucleares.
El OIEA confirmó este domingo que no se detectaron niveles elevados de radiación tras los ataques, pero advirtió que continúa monitoreando la situación de cerca.
Irán promete responder “por todos los medios”
Mientras tanto, el gobierno iraní calificó los ataques como una agresión directa contra su soberanía y su programa nuclear. El ministro de Asuntos Exteriores, Abbas Araghchi, afirmó que Estados Unidos e Israel “cruzaron una línea roja muy peligrosa” y que Irán se reserva el derecho a responder “por todos los medios necesarios”.
Araghchi se dirigía a Moscú para una reunión urgente con el presidente Vladimir Putin. Desde Estambul, donde participaba en una cumbre de la Organización de Cooperación Islámica (OCI), afirmó que los bombardeos “han puesto en peligro la paz y la seguridad internacionales”.
Advertencias desde Turquía
Turquía, anfitriona del encuentro islámico, también se sumó a las voces de preocupación. En una declaración oficial, el gobierno turco alertó sobre el riesgo de que el conflicto entre Irán e Israel escale a un conflicto de alcance global con consecuencias “catastróficas”.
“Los acontecimientos recientes son extremadamente peligrosos. Hacemos un llamado a todas las partes a actuar con contención antes de que la situación se salga de control”, afirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía.
Un conflicto con potencial nuclear
La tensión en Medio Oriente ha alcanzado uno de sus puntos más críticos. La posibilidad de que Irán reciba apoyo militar nuclear de terceros países, como sugiere Medvédev, despierta alarmas en Occidente. Si bien no se mencionaron nombres específicos, el mensaje del ex presidente ruso apunta a una profundización de las alianzas antioccidentales en medio de un conflicto cada vez más volátil.
Mientras tanto, la comunidad internacional observa con creciente preocupación una cadena de acontecimientos que podría redibujar el equilibrio geopolítico del mundo.
