De acuerdo con la policía diariamente unos 200 nicaragüenses tratan de ingresar al país de manera ilegal. Tratan de ingresar con ayuda de taxistas formales e informales, motos o busetas que les cobran entre ?5.000 y ?20.000 para movilizarlos.
Los «coyotes» muchas veces se evitan los operativos policíales ya que en muchas zonas las personas tienen grupos de Whatsapp para informar en que lugares hay operativos policíales.
Los indocumentados vienen en busca de trabajo en labores agrícolas o en actividad minera ilegal de Crucitas.
En los últimos días la policía han endurecido los controles, en los puntos ciegos, pero lo extenso de la franja fronteriza norte, 309 kilómetros hace que los indocumentados busquen mil maneras de burlar la policía.
El paso de indocumentados por puntos de ciegos y el traslado en vehículos tipo taxi, se han convertido en un negocio para los llamados coyotes, que junto con los indocumentados se juegan todo por unos colones.