Por:Henry Esquivel Monge, escritor sancarleño
Hoy le escribo estos versos al ser que más quiero. Le dedico mis letras con el mayor de los esmero.
Aquella que cuando enfermo estaba, pasó días de desvelo al lado mío, la que rio con mis tonteras y me dio sus consejos.
Que no le importaba que comiese ella, si yo estaba lleno, cuantas trabajos pasó mi madre por criarme, con tanto esmero.
Cuantas canas verdes le saqué,pero con mano firme me enseñó que era bueno y de lo malo me aconsejó no hacerlo.
Hoy pinta su pelo con hilos de plata, ah sabiduría tiene cada uno de ellos, que como destellos de luna engalanan su pelo.
No se cuanto tiempo más me la permitirá el cielo, espero que muchos años pues sin ella muero, me muero.
Hoy en tu día te digo, que te amo madre querida de acá hasta el cielo, que el cielo te cuide y te de tu deseo.
Y que tres vidas no me alcan para pagarte lo que haz hecho, gracias madre querida por todo lo bueno. Por darme la vida y regalarme tus consejos.