Por un Click al pasado
Edwin Tinocco Silva, un cajamarquino que fué la mano derecha de Luciano Pavarotti.
Tenía 27 años y trabajaba como Gestor de Servicios de Restauración en el hotel cinco estrellas de Las Américas de Lima y en enero de 1995 llegó a un concierto al Perú Luciano Pavarotti. Se alojó en dicho hotel y fué tan bien atendido, dándole buena impresión al tenor que lo contrató como asistente personal. ¿Cuanto necesitas para venirte con nosotros y ser mi asistente? Le preguntó Luciano a Tinocco al conocerlo. «cinco minutos» contestó él. Fué una desición que le cambió su vida. Una semana después el peruano estaba de gira con el cantante en Río de Janeiro.
El tenor dijo «hicimos de todo, menos el amor porque a mí me gustan las mujeres». Años después Pavarotti se divorció de su esposa y se casó con su secretaria Nicoletta Mantivani en 2003 y tuvo un hijo a los 65 años.
En 2007 ya moribundo por un cáncer de páncreas que padecía, murió y el peruano estuvo en su lecho. Lo último que dijo de Edwin fué que era el «hijo que Dios que nunca me dió».
De acuerdo al último dictamen anunciado por el notario Giirgio Cariani, el penúltimo testamento del maestro lírico Pavarotti, adjudica un millón de euros para ser distribuido en partes iguales para sus estrechos colaboradores, su secretaria histórica Verónica Zeggio y a su asistente, el peruano Edwin Tinocco ?