? Consideran que el cannabis tiene serias consecuencias adversas para la salud física y mental.
? Señalan que, si el país no ha tenido éxito en la regulación de sustancias adictivas como el alcohol y el tabaco, menos podrá regular con éxito la producción y el consumo de la marihuana.
Noviembre, 2022. Recientemente el Poder Ejecutivo presentó el Proyecto de Ley que pretende legalizar el cannabis para el uso recreativo, no obstante, el Colegio de Médicos y Cirujanos y la Academia Nacional de Medicina (ACANAMED), se oponen a la iniciativa al considerar que tendría repercusiones contraproducentes en la salud pública
La posición de este Colegio profesional está sustentada en un pronunciamiento solicitado a ACANAMED, en el que, además, proporciona sus consideraciones respecto al cannabis y sus derivados para su uso medicinal.
Para ambas entidades, el uso recreativo del cannabis tiene serias consecuencias adversas para la salud física y mental.
“Si bien el Proyecto de Ley establece una cantidad máxima que se puede tener por persona, quién va a controlar que esto se cumpla a cabalidad e inclusive podríamos dejar abierta la puerta para un consumo indiscriminado legal. Si Costa Rica no ha tenido éxito en la regulación de sustancias adictivas como el alcohol y el tabaco, menos podrá regular con éxito la producción y el consumo de la marihuana”, declaró el Dr. Mauricio Guardia Gutiérrez, presidente del Colegio de Médicos y Cirujanos.
El Dr. Arístides Baltodano Agüero, presidente de la Academia, externó que la legalización del cannabis recreativo traería consecuencias negativas impredecibles, especialmente en ciertos grupos más susceptibles de la población, como los menores de edad.
“Por ejemplo, cuando se ha legitimado la marihuana para usos medicinales en otras latitudes, se ha disparado el abuso de productos que contienen derivados de esta, particularmente entre los jóvenes, con efectos nocivos para su salud”, expresó Baltodano.
Existe una amplia evidencia de que el uso regular de cannabis puede ocasionar muchos efectos en la salud a largo plazo como en el corazón, infertilidad, posibles tumores de testículo, problemas en los bebés en el útero, en la conducción de vehículos, en la producción de dependencia – adicciones, de trastornos ansiedad, psicosis, alteraciones de la capacidad cognitiva; es por todo esto, que se requieren más estudios científicos para poder bajo estricto rigor científico dar respuesta a todas esas afirmaciones extraordinarias que parecen si tener impactos en el uso diario.
¿Cómo actúa el cannabis en nuestro organismo?
La principal sustancia psicoactiva de la marihuana “cannabis sativa” y responsable de la mayor parte de los efectos “placenteros” es el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC).
En el cuerpo humano normalmente se encuentra una sustancia llamada anandamida, que es un cannabinoide endógeno, el cual es un neurotransmisor que envía mensajes químicos a todo el sistema nervioso. Por la similitud con el THC que se encuentra en la marihuana es capaz de competir, desplazar y engañar por así decirlo al organismo alterando la comunicación que entra y sale del cerebro. Al adherirse el THC a los receptores cannabinoides de las neuronas, impactan áreas del cerebro que se relacionan con: placer, memoria, pensamiento, concentración, coordinación y percepción del tiempo y del espacio. Por lo tanto, al ser capaz de infiltrar el sistema nervioso central altera el funcionamiento normal de la persona que la utiliza en variedad de formas.
El THC puede impactar el hipocampo y la corteza orbitofrontal que son las áreas donde se crean recuerdos nuevos y los focos de atención; teniendo un impacto en memoria, atención y la capacidad de aprender y realizar tareas complicadas. Inclusive el THC altera el cerebelo y los ganglios basales interfiriendo en la regulación del equilibrio, la postura, la coordinación y el tiempo de reacción del individuo.
El THC activa también en el sistema de recompensa del cerebro relacionado con placer como con la comida. Al estimular las neuronas que activan placer, liberan más dopamina de lo usual y con esto dirige al cerebro por así decirlo a repetir una conducta gratificante, lo que conlleva el riesgo adictivo de la marihuana.
El cerebro y el cerebelo no son los únicos órganos blancos donde el THC puede engañar al organismo y ejercer su efecto como es el corazón, el aparato digestivo, además de la excreción en la leche materna o en el transporte a través de la placenta al feto. Esta por entender a mayor profundidad, su interacción con el aparato reproductivo y sus riesgos tanto en el hombre como en la mujer,
Estas alteraciones y su impacto en el cuerpo humano dependerán de múltiples factores propios del cannabis recreacional, la potencia de la droga, de la cantidad consumida, el método de consumo, la frecuencia de consumo, incluso la genética del individuo y obviamente la etapa de la vida de la persona; impactando mayormente a la población en crecimiento como los adolescentes y adultos jóvenes y adulto mayor. Así como que se mezcle con otras drogas.