Crucitas: bomba de tiempo que revienta por si sola debido a la impunidad de años

La muerte de un coligallero ayer debido a un enfrentamiento con la policía y la revuelta de un nutrido grupo de mineros pone en el tapete de discusión la gravedad del problema en Crucitas, cuyos últimos gobiernos no han asumido con autoridad este asunto.

Años de robo de oro ilegal por coligalleros tanto nicaragüenses como costarricenses que han asumido esta zona como tierra de nadie, empieza a reventar por si sola .

Contaminación con mercurio, deforestación, indocumentados, prostitución, tráfico de personas, corrupción policial, robo de oro al parecer por la misma policía, entre otros males poco a poco sacan su factura.

El Robo de oro a vista y paciencia de la policía que de acuerdo al Ministro de Seguridad Mario Zamora cuidan las 24 horas al día, lo que le cuesta al Estado más de 60 millones de cólones mensuales, no para.

Por años Crucitas ha sido Tierra de nadie y los gobiernos se hacen de la vista gorda del tema de la minería ilegal y la contaminación con mercurio las fuentes las agua de la zona .

El resultado es lo que hoy vemos estos enfrentamientos policiales con muertos y daño ambiental sin precedentes.

Y es que de acuerdo a vecinos y especialistas en Crucitas funciona un mafia criminal con aparente complicidad de la policía que permite que la situación empeore cada día más.

El gobierno ha sido incapaz de proteger la zona de coligalleros, la mayoría indocumentados nicaragüenses que ingresan como “Pedro por su Casa “ todos los días y se llevan el oro para Nicaragua.

El gobierno no da explicaciones del oro decomisado a los ilegales. Se presume que se lo dejan la misma policía.

La situación es una bola de nieve que termina en hechos tan lamentables como los suscitados ayer