LLEGAN A JUIGALPA LOS CUERPOS DE FAMILIA CHONTALEÑA FALLECIDA EN DESLIZAMIENTO EN COSTA RICA
Juigalpa, Chontales. – En medio de un profundo dolor y consternación, los cuerpos de Karla Romero, Eddy Miranda y su hija Edith Miranda Romero fueron recibidos la noche de este martes por familiares, amigos y vecinos en la comunidad de Hato Grande, Juigalpa, de donde eran originarios.
Los tres nicaragüenses perdieron la vida el pasado sábado en Piedades Sur, San Ramón, Alajuela, Costa Rica, luego de que un deslizamiento de tierra sepultara la vivienda donde dormían. Las fuertes lluvias registradas en la zona durante la madrugada provocaron el trágico derrumbe que acabó con la vida de la familia mientras descansaba.
Según relataron allegados, Karla y Eddy habían emigrado hace casi un año al país vecino en busca de mejores oportunidades laborales y para ofrecer un futuro más prometedor a su pequeña hija, de apenas 8 años. En Costa Rica trabajaban de manera honesta y mantenían comunicación constante con sus parientes en Nicaragua, quienes nunca imaginaron recibir una noticia tan devastadora.
El traslado de los cuerpos fue coordinado por el Consulado de Nicaragua en San José, con el apoyo de organizaciones comunitarias y compatriotas que realizaron colectas para cubrir los gastos de repatriación. La caravana fúnebre fue acompañada por decenas de personas entre llantos, rezos y muestras de solidaridad.

“Es un dolor que no se puede describir. Se fueron buscando una vida mejor y lo que recibimos ahora son sus cuerpos. Pedimos fuerza a Dios para soportar esto”, expresó entre lágrimas una familiar cercana de Karla Romero.
Las honras fúnebres se realizarán este miércoles en la iglesia de la comunidad y posteriormente serán sepultados en el cementerio local de Hato Grande, donde vecinos han colocado flores, velas y mensajes en memoria de la familia.
El trágico suceso ha conmovido tanto a Nicaragua como a Costa Rica, donde los cuerpos de socorro, autoridades locales y vecinos colaboraron arduamente en las labores de rescate en medio de las lluvias.
Las autoridades costarricenses han reiterado el llamado a las familias que viven en zonas propensas a deslizamientos a mantener la vigilancia y acatar las alertas preventivas, ya que el país sigue bajo la influencia de fuertes lluvias asociadas a la temporada.
Mientras tanto, en Hato Grande, el silencio y las oraciones envuelven a una comunidad que llora la pérdida de tres de sus hijos, recordándolos como una familia unida, trabajadora y llena de esperanza.
