La planta o enredadera de luffa muy común en los patios de los hogares de la Zona Norte, se convierten en alternativas para hacer estropajos o esponjas de limpieza de utensilios de cocina, así como paredes, pisos e incluso para limpieza del cuerpo.
Y es que las esponjas sintéticas elaborados con fibra de plástico, duran cientos de años en degradarse. Los estropajos naturales, son de fácil cultivo, ya que se propagan rápidamente y producen cientos de estos vegetales. Una vez secos, pueden ser utilizados como estropajos de limpieza.
La luffa es un vegetal de la familia del pepino o calabacín. Los estropajos de luffa son muy eficientes como esponja y muy respetuosos con las superficies. Además, tiene gran valor medioambiental al ser un producto biodegradable y renovable. A la hora de cambiarlo lo podemos tirar directamente al compost.
Las esponjas se deben dejar secar al aire y no meterlo húmedo en un tarro cerrado para que no le salga moho, ni se desgaste demasiado rápido. También, de vez en cuando, se puede poner unos segundos en el microondas o en agua hirviendo para quitarle las bacterias.
Estos vegetales no rayan los utensilios de cocina y permite eliminar la suciedad a la perfección. La vida media de este tipo de estropajos está entre unos 4 y 6 meses si se cuida bien, para ello lo recomendable es enjuagarlo tras su uso y dejarlo secar unos 10 o 20 segundos en el microondas. También se utiliza como esponja de baño.
Aunque parece muy áspero cuando está seco, este estropajo se ablandan notablemente al humedecerlo, lo que lo hace apto para fregar hasta las vajillas y cubiertos más delicados sin problema.
Si ese producto es muy bueno yo lo uso para restregarme (baño ), y uso para lavar ollas, etc. Y produzco un poco en el patio de mi casa. Más bien he pensado en verder, coseche unos 40 . Ya con un buen tratamiento producirá mejor y hermosos.