El manatí o vaca marina es un mamífero de tamaño grande, pesa entre 200 y 600 kilos, y vive en el agua. Sus patas anteriores se transformaron en poderosos remos. Las patas traseras están ausentes y la cola se transformó en una aleta aplanada, que el animal utiliza para impulsarse.
El 29 de julio del 2014 la Asamblea Legislativa de declaró el manatí (Trichechus manatus) símbolo de la fauna marina de Costa Rica y de la esperanza e interés de la niñez costarricense en la protección de los recursos naturales presentes en el territorio nacional.
Este mamífero originalmente habitó en los rios San Juan, Sarapiquí, San Carlos, pero en la actualidad han desaparecido de estos de estos sitios, se cree que por la caza, ya que su carne y grasa era muy apetecida por los lugareños.
En la actualidad el manatí amenazado de extinción, se encuentra en el Parque Nacional Tortuguero, algunos canales del Refugio de Vida Silvestre Barra del Colorado y Gandoca Manzanillo, donde es frecuente encontrar rastros de alimentación y en algunas ocasiones se le puede observar.
Los manatíes son herbívoros y comen una variedad de plantas sumergidas, flotantes o emergentes. Se alimentan de unos 60 tipos diferentes de plantas, como hojas de mangle o algas. Para ello usan el labio superior, que está dividido. Un manatí adulto puede comer normalmente hasta un 9 % de su peso, unos 50 kilogramos al día.
El hombre su principal depredador
El único depredador del manatí es el hombre y la contaminación de las aguas, así como la destrucción de su hábitat por el dragado y los motores de las lanchas rápidas. Es una especie legalmente protegida en el país.
La palabra “manatí”, en la lengua indígena caribeña, significa “con mamas”. que se refiere a la característica común de los mamíferos de amamantar a sus crías.
Los manatíes viven en aguas tanto dulces como saladas, cerca de las costas de América y África. La longitud del cuerpo alcanza entre 4 y 5,6-6 metros de largo Alimentación
Reproducción
Cada 2 a 5 años la hembra da a luz una cría, la cual al nacer pesa 35 kilogramos en promedio, y mide de 90 a 120 centimetros de largo. La cría depende totalmente de su madre y permanece con ella por lo menos dos años. Solamente la hembra se encarga de cuidar la cría, dándole leche hasta que sus dientes estén bien formados para comer alimentos duros. Son adultos a los cuatro años y pueden vivir hasta los 80. Su reproducción es sexual con fecundación interna.
Hay un programa muy interesante en Puerto Rico. Hablé de ello en mi blog thespanishwriting.com
En el río Morichal largo Edo Monagas también existen pasan en época de semana santa cuando el río está bajito
Tuve la oportunidad de estudiarlos en su ambiente y es increíble ver a una madre con su hijo es como ver a una madre humana y su bebé. Los cuidan, los miman, los dejan correr pero están pendientes de ellos.