Nos echamos al hombro el equipo médico para servir a indígenas dice dúo de odontólogos
Doctora Guzmán y doctor Montoya recorren zonas indígenas para trabajar con niños y adultos
Por: Henry Alberto Segura Fonseca
La doctora Amalita Guzmán Murillo de 38 años tiene 13 de servir en la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) en el área de salud de San Vito. Su colega y compañero, doctor Michael Montoya Sanabria de 32 años, y con 7 años de laborar en la institución más grande de Costa Rica, conocen muy bien lo que es el trabajo comunitario, emprender giras y enfrentarse a las condiciones climáticas, de relieve y culturales propias de la zona.
Ellos trabajan con la población indígena Ngöbe Bugle del cantón Coto Brus en el sur del país donde cada día enfrentan retos que deben vencer con tal de cumplir con su misión de servicio.
“Mi compañero y yo planificamos giras para servir a los indígenas de Coto Brus y la comunidad en general. Es común que tengamos que echarnos sobre nuestros hombros el equipo médico odontológico para ofrecer las atenciones que demanda población. Debemos enfrentar caminos distantes y malas condiciones en que estos se encuentran, pero cada día salimos llenos de motivación y alegría por atender a los costarricenses, más cuando se trata de personas vulnerables e indígenas” dijo la odontóloga Amalita Guzmán Murillo.
Actualmente la doctora Guzmán apoya a la oficina de epidemiología del área de salud de San Vito, ya que posee una maestría en salud pública y la pandemia provocó ajustes en la prestación de servicios odontológicos, pero el doctor Montoya si está saliendo cotidianamente a hacer visitas a las sedes de ebáis adentrados en los territorios indígenas para dar atención de emergencias.
“Salimos a las 7:00 a.m. y llegamos a las 10:00 a.m. a montar los equipos de trabajo, la cantidad de atenciones diarias varía mucho, pero en promedio se atienden a 25 personas por día. Ahorita me encuentro en la sede de ebáis Territorio Indígena La Casona, que está a 25 kilómetros del centro de San Vito. Para llegar acá hay que cruzar ríos, subir empinadas cuestas y atravesar montañas, pero todo lo hacemos con mucho gusto y vocación de servicio” mencionó el doctor Montoya.
Las condiciones de trabajo en las montañas indígenas de nuestro país requieren de grandes esfuerzos y sacrificios. Muchas veces los vehículos institucionales no llegan hasta los puestos de atención y los servidores de la Seguridad Social deben reinventarse.
“Uno se suda mucho, durante las atenciones debe lidiar no solo con los cuidados de los pacientes, porque entre ellos y uno hay barreras culturales de idioma, de contacto y costumbres distintas, sino también con las condiciones ambientales; hay calor, insectos y limitaciones propias del lugar. Sin importar eso hay que tener estrictos cuidados de control de infecciones” expresó la doctora Guzmán
La captación de los pacientes es un trabajo que se realiza en conjunto con los médicos de cada ebáis, el personal de Enfermería y redes. En cada gira hay muchos funcionarios que dan sus valiosos aportes y ayudan a cumplir los propósitos de la CCSS.
“Nunca se tiene la certeza de qué o cuáles situaciones enfrentará cada día, en cada jornada experimenta experiencias nunca vividas que lo hacen crecer como persona y profesional. Uno sale de la casa, pero no sabe a qué hora estará de vuelta. Uno se enfrenta a aguaceros típicos de las montañas, hay que esperar a que la lluvia cese y ser paciente hasta que bajen los caudales de los ríos para poder cruzarlos. A veces tenemos que arriesgarnos a cruzar por puentes de hamaca en pésimo estado con los equipos odontológicos sobre nuestras espaldas” contaron ambos odontólogos.
Por ellos y todos los profesionales en odontología es que la Caja reconoce su trabajo, su esfuerzo, dedicación y entrega a las personas que viven en el país del “Pura Vida”.
Cada 9 de febrero se conmemora el Día de Santa Apolonia, patrona de los profesionales en odontología que se deshacen en atenciones en ebáis, áreas de salud y hospitales de la Caja Costarricense de Seguro Social.