Durante años los poblaciones rurales de antaño crecieron mirando las luciérnagas que alumbran las noches oscuras y de luna llena. Pqueñas lucecitas que se apagaban y se encendían por todas partes.
Hoy este espectáculo único ha desaparecido. Ya se ven pocas luciérnagas en las noches oscuras debido al daño ambiental, pesticidas y luminosidad artificial
Las luciérnagas pertenecen a la familia de lampíridos (Lampyridae), coleópteros polífagos que incluye los insectos conocidos como luciérnagas, bichos de luz, curucusíes?, isondúes,? cucuyos, candelillas, y gusanos de luz, caracterizados por su capacidad de emitir luz (bioluminiscencia).
Un artículo publicado por la CNN en febrero del 2020, con estudios de expertos en biología, indican que luciérnagas dependen de la bioluminiscencia (reacciones químicas dentro de sus cuerpos que les permiten encenderse) para encontrar y atraer parejas, y demasiada luz artificial puede interferir con este cortejo. Cambiar a bombillas LED de energía eficiente y que son demasiado brillantes no está ayudando, dijo Owens.
«La pérdida de hábitat está conduciendo a la disminución de muchas especies de vida silvestre, y algunas luciérnagas sufren porque necesitan ciertas condiciones ambientales para completar su ciclo de vida, dijo Sara Lewis, profesora de biología en la Universidad de Tufts, quien dirigió la investigación publicada en la revista Bioscience«. señala el medio
Existen unas 2.000 especies de luciérnagas. Estos insectos viven en diversos entornos cálidos y en regiones más templadas, y son una presencia familiar en las noches de verano. A las luciérnagas les encanta la humedad y por ello se encuentran a menudo en regiones húmedas de Asia y del continente americano. En zonas más secas se pueden encontrar en las proximidades de áreas húmedas o pantanosas que retienen la humedad.
La característica más distintiva de los lampíridos es su cortejo nocturno, el cual consiste de un diálogo complicado entre los machos y las hembras de una especie. Típicamente los machos patrullan en busca de pareja con un vuelo característico mientras emiten secuencias de destellos de luz característicos de cada especie. Las hembras de la misma especie pueden responder con destellos específicos y así el apareamiento puede ocurrir.
Las luciérnagas tienen órganos lumínicos especiales situados bajo el abdomen. Cuando absorben oxígeno, éste se combina dentro de las células especiales con una sustancia llamada luciferina y reacciona produciendo luz sin apenas generar calor.
La luz de la luciérnaga es por lo general intermitente, y brilla de un modo específico en cada especie. Cada forma de brillar es una señal óptica que ayuda a las luciérnagas a encontrar posibles parejas. Los científicos no saben exactamente cómo regulan los insectos el proceso de encender y apagar su luz.
Los científicos han detallado un «apocalipsis silencioso» entre las poblaciones de insectos, con el 41% de las especies de insectos en peligro de extinción, según un informe reciente sobre la disminución de insectos para UK Wildlife Trusts, escrito por Goulson.
El documento de la luciérnaga destacó el riesgo que representan los insecticidas, como los neonicotinoides, que se usan en Estados Unidos para las semillas de maíz y soja.
Foto Prinicipal. Artículo Revista Semana.