- Municipalidad de San Carlos lidera grupo de acción con acompañamiento estatal
Si algo claro tienen las autoridades nacionales respecto al paso de personas venezolanas migrantes, es que estas no pretenden establecerse en suelo costarricense, todo lo contrario, su intención es continuar lo más pronto posible hacia los Estados Unidos.
Muchos de ellos carecen de los recursos suficientes para seguir hacia el llamado “sueño americano” y, en su recorrido, San Carlos se convirtió en una especie de “comunidad albergue” donde de manera temporal pueden reabastecerse.
Esto provocó que el cantón sea expuesto a nivel internacional entre las personas venezolanas y otras nacionalidades como un lugar solidario de estancia, lo que genera que cientos de migrantes estén dispuestos o encaminados ya hacia tierras sancarleñas, según prevén autoridades migratorias nacionales.
Para expertos policiales la situación puede desbordarse y crear aumento desmedido de extranjeros deambulando y pernoctando por las calles de los centros poblacionales, principalmente de Ciudad Quesada, con todas las consecuencias sociales, sanitarias y de seguridad que esto acarrea.
Incluso ya es visible la toma de espacios públicos en ciertos sectores del área urbana del Distrito Primero, así como en las cercanías de la terminal de buses y comercios aledaños.
En busca de soluciones, el recién fin de semana se reunió una mesa de trabajo interinstitucional encabezada por la Municipalidad de San Carlos para la atención del tema migratorio cantonal conformado por diferentes organismos locales con acompañamiento de autoridades estatales.
El encuentro organizó que, desde este pasado lunes 5 de septiembre de 2022, se ejecuten una serie de tareas conjuntas para controlar y monitorear el flujo migratorio, así como facilitar en la medida de lo posible el camino que llevan estas personas hasta la frontera norte.
Como parte de las medidas se refuerza con rondas y vigilancias policiales algunos sectores específicos del área urbana de Ciudad Quesada donde es evidente la presencia de extranjeros para evitar la toma de espacios públicos o sitios privados.
Presencia de una móvil estacionaria de Policía de Migración durante tiempo indefinido cerca de la terminal de autobuses, así como atención prioritaria y albergue a niños (as) y personas en condición vulnerable y/o enfermas a través de las instituciones pertinentes.
Se trabaja también con el Consejo de Transporte Público (CTP), para que las empresas de transportes, en este caso San José – San Carlos y San Carlos – Los Chiles, tengan permiso para aumentar la cantidad de viajes con tal de acelerar el tránsito de extranjeros.
Autoridades gubernamentales y policiales hacen un llamado vehemente a la población sancarleña, que, si bien es loable y de agradecer la colaboración para con las personas migrantes, es mejor, en medida de lo posible, evitar darles ayudas individualizadas o muy específicas.
Eso para evitar situaciones esporádicas que ya se han presentado, como robos o hurtos, sobre todo en el cantón de Los Chiles, además de que también algunas personas por su propia condición y/o padecimientos pueden empeorar según lo que coman.
Para atenderlos existe toda una organización civil que trabaja de la mano con la institucionalidad para ayudar a estas personas según sus necesidades, por lo que se hace el llamado general para dejar a las autoridades locales realizar su labor de atención.
Quienes quieran colaborar pueden hacerlo directamente con los grupos de apoyo organizados por la sociedad civil, quienes conocen las necesidades que presentan las personas extranjeras para atenderle de mejor manera.
Se debe recordar que también hay un gran porcentaje de los migrantes prefieren evitar el apoyo de las instituciones para mantenerse en las calles solicitando dinero o evitar controles migratorios.
Las autoridades insisten en que entre estos grupos de migrantes vienen miembros de grupos criminales que trafican con personas y las ayudas desorganizadas e individualizadas más bien benefician a las organizaciones delictivas.
Durante la mesa de trabajo participaron la alcaldesa de San Carlos, Karol Salas, miembros organizados de la sociedad civil sancarleña, representantes de instituciones locales como Cruz Roja, Fuerza Pública, Ministerio de Salud, entre otros
Así como la viceministra de Gobernación y Policía con recargo de la presidencia ejecutiva de la Dirección General de Migración y Extranjería, Marlen Luna, y el subdirector de la Policía Profesional de Migración, Germán Soto.