Una conductora de 70 años le arrebata la vida a un joven emprendedor con un futuro por delante. El criador de serpientes José Alberto Delgadillo, falleció en el Hospital de Matagalpa, luego de sufrir un accidente de tránsito la tarde del martes al momento que viajaba en su motocicleta.
El accidente ocurrió en Cerro Largo, carretera Matagalpa -Sébaco. La camioneta que impactó a Delgadillo supuestamente era conducida por Angela Rosa Icazbalceta de 70 años, quien junto a su acompañante también fueron trasladados al Hospital César Amador Molina.
El zootecnista se dedicó por muchos años al cuido y protección de reptiles, y era propietario de una de las primeras tiendas de animales exóticos que abrió en el país.
José Alberto Delgadillo, un veterinario de 28 años residente en Matagalpa, Nicaragua, tenía un sueño peculiar: abrir una tienda de exhibición de reptiles en la capital, Managua. Aunque por el momento este proyecto está en espera, Delgadillo comparte su hogar con 45 serpientes de 15 especies diferentes, desde inofensivas hasta venenosas, las cuales cuida con esmero y considera sus «mascotas».
Su fascinación por los reptiles comenzó hace ocho años, cuando, al tener una iguana como mascota, no encontró a nadie que pudiera atenderla cuando enfermó. Este hecho lo inspiró a estudiar medicina veterinaria y especializarse en serpientes.
Delgadillo había convertido su casa en un albergue de reptiles, ofreciendo un espacio donde las personas pueden entrar y ver estas fascinantes criaturas por un precio simbólico.
La colección incluía especies como falsas corales, boas constrictoras, serpientes de cascabel, pitones y culebrillas verdes, todas rescatadas, regaladas o compradas en criaderos. Su objetivo principal es desmitificar los prejuicios y estigmas asociados a estos animales exóticos, demostrando que son criaturas tranquilas que atacan solo cuando se sienten amenazadas.
La casa de Delgadillo también albergaba otros animales, como tortugas terrestres, iguanas, dragones barbudos y un perro. Celebrando la aceptación gradual de las serpientes en la sociedad, el veterinario aboga por adoptarlas como mascotas, especialmente para aquellos alérgicos a perros o gatos. Además, es conocido por liberar serpientes encontradas en la ciudad en lugares más seguros.
Con la esperanza de avanzar en su pasión, José Alberto Delgadillo aspiraba a abrir una tienda-criadero en Managua, donde las personas puedan conocer diferentes especies de serpientes sin temor, ya que insiste en que estos animales solo atacan cuando se les molesta. Según un estudio, Nicaragua cuenta con 107 especies de serpientes, de las cuales solo 13 son venenosas.