Planificó el asesinato de su madre e intentó matar a su hermana. María Angélica Medina, de 79 años y sobreviviente de cáncer, quien caminaba con ayuda de un andarivel, fue su primera víctima. Sabía que su madre permanecía sola y vulnerable.
Fue así que el 15 de abril, el sujeto Wilfredo Manuel Herrera Medina, de 44 años, llegó hasta la vivienda ubicada en la Colonia 14 de Septiembre. Ingresó a la vivienda y desconectó la cámara de seguridad que estaba en la habitación de su mamá con el objetivo de que no quedara grabado el crimen que iba a cometer. Herrera Medina, usando unos guantes de nylon, se acercó a su madre, quien no imaginaba que su hijo llegaba para matarla. Con ambas manos le apretó el cuello hasta que dejó de respirar.
El delincuente procedió a desinstalar la segunda cámara ubicada en el porche de la vivienda, pero su hermana Isidra Medina lo observó por el celular, el cual tenía vinculado con la cámara de vigilancia. Llamó a un tío para que llegara a la casa y ella pidió permiso para irse lo más rápido que pudo. El sujeto, luego de matar a su madre, tomó 15 mil 300 córdobas y 38 dólares, dinero que su hermana tenía ahorrado, y dos tarjetas bancarias. Según la acusación, cuando Isidra llegó a la vivienda, el sujeto estaba escondido en el baño y al preguntarle qué hacía, le dijo que reparaba una bujía.
Cuando su hermana se dio la vuelta para ir a buscar a su mamá, el sujeto le hizo la llave conocida como “el popo”, la trasladó hacia la cocina, se apoderó de un cuchillo y la apuñaló en tres ocasiones, hiriéndola en el antebrazo y en la espalda. Luego, salió corriendo hacia la calle con una mochila donde llevaba lo robado. Sin embargo, en ese momento estaba llegando el tío de Isidra, al que había alertado minutos antes, logrando su captura junto con los vecinos a cuadra y media de la vivienda. El hombre que fue acusado por parricidio y parricidio frustrado, quedó en prisión preventiva.
Por Primerisima Nicaragua