En el Pacífico sur
Gracias a los patrullajes preventivos efectuados por el Servicio Nacional de Guardacostas, más de 700 kilos de cocaína y marihuana que estaban atados a una radioboya no llegarán a su destino, pues las autoridades se anticiparon a los narcotraficantes que los iban a recoger.
El cumplimiento tuvo lugar el martes a 15 millas náuticas de la entrada del Golfo Dulce, durante un patrullaje realizado por oficiales del Grupo de Apoyo de Operaciones Especiales del Guardacostas, quienes encontraron una radioboya a la cual estaban amarrados con una cuerda varios bultos con aparente droga.
La droga fue llevada hasta Golfito, donde, en coordinación con el Ministerio Público y la Policía de Control de Drogas se determinó que el cargamento consistía en 677 paquetes con aproximadamente un kilo de cocaína cada uno, así como 30 paquetes con aproximadamente un kilo de marihuana cada uno, además de una bolsa con marihuana.
El uso de este tipo de dispositivos para realizar entregas de drogas en el mar es algo que las autoridades costarricenses detectaron desde el 2015, por lo que desde entonces varios cargamentos de estupefacientes han sido interceptados por parte del Guardacostas mucho antes de que los narcotraficantes llegaran a recoger la droga luego de rastrearla mediante un sistema de localización satelital.