• Motociclista llevaba casi mil unidades de pólvora explosiva entre bombetas, triquitraques y espantasuegras, todo lo cual está prohibido.
• Quienes transporten o expendan pólvora ilegalmente se exponen a penas de hasta siete años de prisión.
• Autoridades con cero tolerancia a las acciones irresponsables de adultos que exponen a las niñas y niños a quemaduras y mutilaciones con pólvora.

En el marco de los minuciosos controles que realizan las autoridades del Ministerio de Seguridad Pública, a fin de impedir el trasiego ilegal de todo tipo de mercancías en la frontera norte, la Fuerza Pública decomisó la tarde del martes el primer cargamento de pólvora contrabandeada de la temporada de fin de año.

La peligrosa mercancía era transportada por un motociclista costarricense, quien es de apellido González, a quien lo acompañaba una mujer apellidada Guido, los cuales fueron interceptados por oficiales del Grupo de Apoyo Operacional (GAO) de la Fuerza Pública durante un control de carreteras efectuado en la comunidad fronteriza de La Cruz, distrito de Delicias, cantón de Upala.

González llevaba una bolsa dentro de la cual los oficiales encontraron 866 triquitraques y 11 bombetas, todo lo cual constituye pólvora explosiva que, por su alto poder destructivo, tanto su importación, transporte y comercialización están prohibidos.

También llevaba 20 cajas de espantasuegras con cerca de 30 unidades cada caja, lo cual también está prohibido por ser explosivo, por lo que el total de pólvora explosiva suma cerca de mil unidades.

Asimismo, le decomisaron 20 unidades de pólvora de lucería denominadas candelas romanas, cuya venta sí está permitida en el país, pero en los comercios legalmente establecidos. Sin embargo, al haber sido introducidas al país de manera ilegal, también fueron incautadas.

Tras realizar las debidas coordinaciones con la Fiscalía de Flagrancia de Upala, dicha instancia judicial ordenó la incautación de la pólvora, la cual procedía de territorio nicaragüense, pues nos solo se estaba ante una presunta violación de la legislación en materia de armas y explosivos, sino también de las normas tributarias y sanitarias costarricenses.

Hasta siete años de cárcel para contrabandistas de pólvora

El artículo 93 de la Ley de Armas y Explosivos contempla penas de hasta siete años de prisión para quienes introduzcan pólvora al país de manera irregular, o la transporten o la expendan al margen de nuestro ordenamiento jurídico.

Ante la cercanía de la temporada navideña y de fin de año, la Fuerza Pública y la Policía de Fronteras se encuentran en alerta para detectar este tipo de artículos, así como cualquier otro tipo de mercancías ilegales, tanto en la frontera norte como sur.

Mediante estos esfuerzos las autoridades esperan contribuir a que el país no registre ningún niño o niña víctima de quemaduras o mutilaciones durante este fin y principio de año debido a las acciones irresponsables e ilegales de personas adultas, quienes más bien deberían propiciar la protección de las personas menores de edad en vez de exponerlas de manera innecesaria.