• GPS del celular de la víctima los guió hasta el búnker donde estaban los presuntos hampones con el botín
• También encontraron el arma con la que presuntamente amenazaron a la víctima.
• Agentes fronterizos recuperaron pertenencias de la víctima dentro de la guarida de los sospechosos

La rápida movilización de oficiales de la Policía de Fronteras, destacados en La Cruz, frontera norte, permitió dar con cinco sospechosos de asaltar a un viajero para arrebatarle dinero, un celular y ropa.

El cumplimiento tuvo lugar el domingo, cerca del puesto de Peñas Blancas, cuando un nicaragüense de apellido Cerdas se dirigía al puesto de Migración para viajar a su país.

Según denunció, unos sujetos lo introdujeron por la fuerza a un búnker tras amenazarlo con una pistola y un cuchillo, luego de lo cual lo golpearon con la cacha del arma.

Posteriormente le quitaron 37.000 colones, un celular y un bolso con ropa nueva.

Es por ello que, tras recibir la denuncia, los oficiales rastrearon el celular de la víctima, el cual estaba dentro del búnker donde habían introducido a la víctima.

Tras intervenir a uno de los sospechosos, quien es de apellido Ibarra, este tenía en su poder el celular de la víctima.

También fue detenido un nicaragüense de apellido Montes, el cual profirió amenazas de muerte contra los oficiales cuando estaban verificando su condición migratoria, por lo que podría ser procesado por amenazas contra funcionario público.

Otros dos sujetos apellidados Jiménez y Alanís, quienes son nicaragüense en condición migratoria irregular, fueron reconocidos por la víctima como los responsables de amenazarlo y golpearlo con el arma, por lo que también fueron aprehendidos.

Por último, un sujeto de apellido Madrigal, quien llevaba puesta parte de la ropa que según el denunciante le habían sustraído, también fue detenido.

Dentro del búnker los oficiales fronterizos encontraron una pistola calibre 25 y dos pistolas plásticas de juguete, todo lo cual fue decomisado.

Los cinco fueron remitidos a la orden de la Fiscalía de Liberia junto con las evidencias recabadas en el búnker.