• Mayor control y eficiencia de unidades policiales en las fronteras aérea, marítima y terrestre
• Policía de Control de Drogas (PCD) intensificará sus operaciones de investigación y judicialización de casos relacionados al narcotráfico y legitimación de capitales
La Policía de Fronteras asumió un rol más protagónico en el resguardo de las fronteras marítimo, terrestre y aéreo, que le permitirá a la Policía de Control de Drogas (PCD), dedicar sus recursos a la investigación y judicialización contra el narcotráfico y legitimación de capitales, principales operaciones del crimen organizado.
El viceministro de Unidades Especiales del Ministerio de Seguridad Pública, Manuel Jiménez Steller, explicó que: “la nueva estrategia permite que cada policía especializada actúe en el ámbito de las competencias establecidas en la Ley General de Policía, pero que primordialmente ejecuten, en donde deben estar, el trabajo especializado para el cual fueron creadas”.
Jiménez detalló, por ejemplo, el rol de la PCD, que en sitios fronterizos venía desempeñando labores preventivas, cuando es la única policía con la competencia para investigar y judicializar casos. “Si contamos con una unidad especializada en este ámbito, tenemos claro que mejoraremos el combate contra el narcotráfico con más oficiales especializados en las calles, judicializando casos y desarticulando estas estructuras, que es el gran reto, que como país tenemos en este momento, por la ola de violencia que genera esta actividad ilícita”.
El viceministro Jiménez recordó que la nueva estrategia responde a un análisis profundo de las fortalezas de las distintas policías, que fue incorporada de lleno el pasado 13 de julio, cuando se puso en marcha la Operación Soberanía con el funcionamiento de los escáneres en la terminal portuaria de APM Terminals, y en la que el Ministerio de Seguridad Pública tomó el control de la seguridad de las instalaciones.
Este proceso ha llevado a ubicar una fuerza de tarea en la Terminal de Contenedores de Moín, a fin de minimizar la posibilidad de que estas estructuras criminales continúen utilizando este puerto como centro logístico para el tráfico internacional de drogas, y que estaban ocasionando afectaciones al país en los procesos de exportación, que llevaría pronto a tener repercusiones negativas de índole económico.
En el caso de los aeropuertos, Jiménez, subrayó que el cambio en la responsabilidad de la PCD se circunscribe a la labor preventiva, que es asumida por el Servicio Vigilancia Aérea en su unidad de Policía Aeroportuaria.
“De nuevo en este caso, la PCD continuará su labor en estos puntos, pero enfocada al campo investigativo y así aprovechar el gran trabajo que realiza este cuerpo policial. Procuramos, además, reforzar las acciones conjuntas con el Organismo de Investigación y el Ministerio Público, en un esfuerzo integral que es urgente para contener la ola criminal. Las medidas se van a ir implementando de manera gradual, y van acompañadas de procesos de capacitación y de actualización de parte de nuestros policías especializados y de la cooperación internacional”, finalizó el viceministro Jiménez.
La reorganización cuenta con el apoyo técnico y de asesoría de parte de la oficina contra las Drogas y el Delito de las Naciones Unidas, ONUDC, en la implementación de la Unidad de Control Portuaria, misma que se establece a partir del Programa de Control de Contenedores de Naciones Unidas.
El Ministerio de Seguridad Pública también recibió el acompañamiento de autoridades estadounidenses, para trabajar en el proyecto de fortalecimiento de los procesos de control en las terminales aéreas y portuarias del país, para lo cual se ha visto en la necesidad de reorganizar a los cuerpos policiales especializados en la forma de combatir la delincuencia organizada transnacional y sus efectos.