Por Ramón Meneses
Los padres de familia de la escuelita El Rosario de Upala con 62 años de construida piden al Ministerio de Educación (MEP) que atiendan la orden de la Sala Cuarta y reparen la aulas dañadas de la institución, peto que no trasladen a los estudiantes a otras escuelas
La historia de esta escuela está marcada por la lucha de los padres de familia por mejorar las condiciones del plantel. A lo largo de los años, han presentado solicitudes al MEP para reparar el deterioro y la falta de mantenimiento, así como para implementar mejoras según la Ley 7,600. Lamentablemente, estas peticiones no han sido atendidas, incluso tras la devastación causada por el huracán Otto hace ocho años.
Ante la falta de respuesta, los padres decidieron acudir a la sala cuarta en busca de justicia. Finalmente, tras dos meses de espera, la sala resolvió a favor de la comunidad, ordenando al MEP abordar la situación. Sin embargo, esta victoria se ve empañada por las órdenes sanitarias pendientes: una de reparaciones en 2015, con un presupuesto asignado pero nunca entregado, y otra en 2023 que menciona reparaciones, y la más reciente que insta a la demolición de todo el centro educativo.
La junta de educación de la escuela confirma que, de las cinco aulas, solo una está en condiciones aceptables, mientras que las demás requieren reparaciones. Ante la amenaza de demolición y el traslado de los niños a otras escuelas, los padres de familia han alzado su voz en protesta. Reclaman el derecho a que se repare la escuela que ha sido su hogar educativo desde 1962, con 62 años de historia. Argumentan que sus hijos no son simples objetos que puedan ser trasladados de un lugar a otro según los caprichos del MEP. Además, temen por el impacto psicológico y el posible acoso que podrían sufrir en otros centros educativos, al provenir de una humilde escuela rural.
Las razones para mantener la escuela en su ubicación original son variadas y profundas, reflejando el arraigo y la identidad de la comunidad con su institución educativa.
En el pintoresco escenario de la escuelita primaria multigrados, un oasis de aprendizaje en la comunidad, se encuentran tres profesores unidocentes del MEP. Además, se suma el invaluable aporte de una profesora del preescolar, una dedicada encargada de la cocina y otra señora que se ocupa del meticuloso aseo y la limpieza de las instalaciones, todos ellos comprometidos empleados del MEP.
En este centro educativo, se brinda no solo educación, sino también cuidado integral a los niños. Se les provee desayuno, almuerzo y merienda, garantizando así su bienestar nutricional. Además, se facilita el transporte con una buseta que recoge y deja a los estudiantes desde sus hogares hasta la escuela, ubicada a unos 5 km del centro de Upala, en la ruta #06 Upala-Cañas. Con servicios básicos como luz, internet y agua potable, se asegura un ambiente propicio para el aprendizaje.