La Zona Norte de Costa Rica, en especial las áreas cercanas a la frontera con Nicaragua, se ha convertido en una región preferida por estructuras criminales para el lavado de dinero proveniente del narcotráfico.
Su ubicación geográfica, la amplitud del territorio y la presencia limitada de controles en algunas zonas rurales la vuelven especialmente atractiva para operaciones ilícitas.
De hecho, en varios casos recientes, como el del sujeto conocido como alias “Diablo”, lideraba una red dedicada al tráfico de droga en la zona y se ha logrado determinar que el dinero es invertido en propiedades, ganado y otros activos en fincas ubicadas en esta región.
A pesar de la desarticulación de varias bandas, las autoridades han detectado que los antiguos integrantes continúan utilizando la zona para mover recursos y ocultar bienes de origen ilícito, aprovechando su cercanía con rutas utilizadas para el contrabando y el paso de droga.
Narco usaba finca en zona fronteriza como posible centro de operaciones y ocultamiento de droga
Ayer una extensa propiedad ubicada en Coopevega de Cutris, San Carlos, fue allanada por agentes de la Sección de Estupefacientes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), en coordinación con la Fiscalía de Narcotráfico y otras dependencias.
El operativo se desarrolló como parte de una investigación contra Edwin Vargas García, conocido con el alias de “Sobrino”, señalado como presunto líder de una red criminal que controlaba el tráfico de drogas en el sector este de San José.
La finca, ubicada en una zona montañosa a unos tres kilómetros del centro de Coopevega y de difícil acceso por contar únicamente con una calle angosta, fue intervenida el lunes anterior. Según indicaron las autoridades, Vargas habría utilizado parte de las ganancias obtenidas de forma ilícita para adquirir bienes, entre ellos este terreno de gran extensión, localizado en una región próxima a la frontera con Nicaragua.
De acuerdo con las investigaciones, se sospecha que el inmueble podría haber sido utilizado como centro de acopio y ocultamiento de cargamentos de droga. Por esta razón, los agentes judiciales realizaron inspecciones minuciosas en busca de caletas o compartimentos ocultos.
Durante el allanamiento, se decomisaron diversos animales, entre ellos vacas, toros, terneros, ponis y una variedad de aves exóticas como gallinas de Guinea, chompipes, pavos reales y emús.
Las especies fueron revisadas por funcionarios del Servicio Nacional de Salud Animal (SENASA), quienes constataron la presencia de animales no autorizados.
“El emú, por ejemplo, es un ave originaria de Australia y no figura dentro de la lista oficial de especies exóticas permitidas por SENASA. Esto convierte su tenencia en ilegal”,
Vargas García fue detenido el pasado 29 de enero en Sabanilla, San José, cuando salía de un complejo de apartamentos. Actualmente se encuentra en prisión preventiva, mientras avanzan las diligencias judiciales en su contra. Las autoridades lo vinculan con al menos ocho homicidios registrados en el este de la capital y lo identifican como figura clave en la pugna territorial por el control de la venta de estupefacientes en esa región.
Uno de sus principales rivales sería otro presunto cabecilla conocido como “Shaggie”, oriundo de León XIII, con quien mantiene una disputa por el dominio de plazas de distribución de droga.
El caso vuelve a poner en la mira la Zona Norte del país, considerada por las autoridades como una región estratégica para grupos del crimen organizado. Su proximidad con la frontera nicaragüense, la amplitud del territorio y la limitada presencia estatal en algunas áreas convierten la región en un punto atractivo para actividades ilícitas como el narcotráfico y el lavado de dinero.
Fuentes del OIJ no descartan que otros bienes vinculados a “Sobrino” puedan estar ocultos en la zona, por lo que la investigación continúa abierta
