OIJ desmantela red de legitimación de capitales que habría movido más de ?3.000 millones mediante propiedades, comercios y subasta ganadera en Guanacaste.
Una operación conjunta liderada por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) logró desarticular este martes una presunta red criminal dedicada al lavado de dinero en Costa Rica, la cual utilizaba actividades ganaderas y bienes de alto perfil como fachada para legitimar capitales provenientes de actividades ilícitas.
La intervención se realizó mediante 20 allanamientos simultáneos en distintas localidades del país, abarcando desde Pérez Zeledón, en la zona sur, hasta Bagaces, en Guanacaste. Los operativos incluyeron registros en residencias, oficinas administrativas, locales comerciales y hasta una reconocida subasta ganadera, considerada uno de los principales ejes de la red.
Un patrimonio sin explicación
La investigación, a cargo de la Sección de Legitimación de Capitales del OIJ, reveló que los sospechosos habrían movilizado más de ?3.000 millones en activos, cuya procedencia no contaba con un sustento económico legal. El caso se remonta a 2023, cuando un ciudadano guatemalteco —quien había cumplido condena en su país por delitos relacionados con el narcotráfico— comenzó a mostrar un acelerado y ostentoso crecimiento patrimonial en Costa Rica.
Entre las propiedades incautadas figuran casas de lujo en Santa Ana y La Guácima, oficinas en zonas comerciales de alta plusvalía como Zapote, Montes de Oca y La Unión, así como vehículos de alta gama y ganado de razas valoradas en millones de colones.
Los nexos costarricenses
Según las autoridades, el extranjero no actuaba solo. El OIJ logró establecer nexos con dos hermanos costarricenses con un perfil económico aún más elevado, quienes presuntamente fungían como los operadores financieros del grupo. Su rol habría sido fundamental para dar apariencia de legalidad a los movimientos económicos, utilizando empresas pantalla, inversiones en bienes raíces y transacciones vinculadas al comercio ganadero de lujo.
Una de las principales líneas de investigación apunta a la subasta ganadera como un canal utilizado para inflar el valor de los activos y permitir el ingreso de dinero en efectivo bajo la apariencia de compra y venta de animales de alto valor genético.
Evidencia clave
Durante los allanamientos, el OIJ confiscó documentos contables, registros de propiedades, dispositivos electrónicos y evidencia bancaria que podrían ser clave para probar el delito de legitimación de capitales. Todos los detenidos fueron puestos a las órdenes del Ministerio Público, que ahora analizará si solicita medidas cautelares, como prisión preventiva o congelamiento de bienes, contra los principales sospechosos.
“Estamos hablando de una estructura organizada, con presencia nacional y con una capacidad importante de generar apariencia de legalidad. Este caso evidencia cómo algunas actividades económicas, como la ganadería o el comercio de bienes raíces, pueden ser utilizadas como herramientas para el blanqueo de capitales”, indicó una fuente judicial cercana al caso.
Más arrestos en la mira
Las autoridades no descartan nuevas detenciones en los próximos días, ya que la red parece haber contado con la colaboración de abogados, contadores y asesores financieros. El caso ha puesto bajo la lupa los mecanismos de control sobre el origen de los fondos en sectores como el ganadero y el inmobiliario, donde grandes sumas de dinero pueden circular sin una fiscalización estricta.
La operación ha sido catalogada como uno de los golpes más fuertes al crimen organizado económico en los últimos años, y refuerza la advertencia de las autoridades sobre la creciente sofisticación de las estructuras de lavado en el país.