Nuevo golpe al narcotráfico en aguas del Pacífico Sur: decomisan más de una tonelada y media de cocaína en barco pesquero
Golfito, 19 de junio de 2025 — En una operación contundente contra el narcotráfico, el Servicio Nacional de Guardacostas interceptó una embarcación pesquera que transportaba 1.840 paquetes de cocaína, a más de 280 kilómetros al suroeste de Cabo Matapalo, en la Península de Osa.
El exitoso operativo fue ejecutado por el Grupo de Operaciones Especiales (GOPES), quienes abordaron el bote Zona Cero, tras detectar movimientos sospechosos en altamar. Al inspeccionar la hielera del barco, encontraron varios bultos que contenían el cargamento de droga. Los cuatro tripulantes fueron inmediatamente detenidos.
Según confirmaron las autoridades, entre los arrestados se encuentran dos costarricenses y dos nicaragüenses con residencia en el país. Uno de ellos cuenta con antecedentes por narcotráfico desde el año 2016, lo que refuerza las sospechas de reincidencia delictiva.
La embarcación fue escoltada hasta el muelle de Golfito, donde agentes de la Policía de Control de Drogas (PCD) realizaron la prueba de campo, confirmando que se trataba de cocaína. Todos los sospechosos fueron remitidos al Ministerio Público, quedando a la espera de la audiencia judicial correspondiente.
Durante la misma operación, las autoridades también interceptaron una segunda embarcación, la cual fue registrada y posteriormente liberada, al no encontrar evidencia de tráfico de drogas a bordo.
Este decomiso representa el tercer caso en lo que va del 2025 en que las autoridades costarricenses logran incautar drogas en barcos pesqueros que operan en la misma zona del Pacífico Sur, una ruta cada vez más utilizada por el crimen organizado para movilizar cargamentos hacia el norte del continente.
? Compromiso por la seguridad marítima
Con este nuevo golpe, el Servicio Nacional de Guardacostas reafirma su labor estratégica en la protección de las aguas territoriales y la lucha contra el narcotráfico. Las autoridades reiteran su compromiso con el resguardo de los recursos marinos y la defensa de la soberanía nacional ante el crimen transnacional.
La operación demuestra, una vez más, la importancia de la vigilancia constante en alta mar y la cooperación interinstitucional para enfrentar este flagelo que amenaza la seguridad y la paz en la región.
