La semana pasada los diputados, aprobaron en primer debate el proyecto de ley que declara de interés publico la apicultura en Costa Rica y el 20 de mayo como día de la abejas. Esto pese, que según investigaciones es uno de los países más voraces en en el consumo de plaguicidas del mundo.
De acuerdo conel Informe del Estado de la Nación, del 2018 la proporción de fincas que emplea fertilizantes pasó de 12,5% en 1973 a 82,1% en el 2014. Además, cita datos del Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), según los cuales en el 2016 se importaron 6.706.442 kilogramos de ingrediente activo y en el país se formularon 5.600.524 kilogramos. Por ello, ese Informe estimó que se usaron 8.897.084 kilogramos de plaguicidas.
Según un artículo del Semanario Universidad, datos en poder del Instituto Regional de Estudios en Sustancias Tóxicas (IRET) de la Universidad Nacional (UNA) revelan que en el país se usan en promedio 18,2 kilogramos de plaguicidas por hectárea de cultivo agrícola.
Comparado con otros países, Costa Rica aparece en el primer lugar mundial, seguido por China, con 17 kilos, explicó Fernando Ramírez, ingeniero agrónomo e investigador del IRET.
La cantidad es muy superior a la de otros países como Estados Unidos, donde se usan alrededor de 2,5 kilos por hectárea.
Así las cosas, pareciera contradictorio que los diputados busquen declarar la actividad de la apicultura como interés publico y declarar 20 de mayo día internacional de las abejas, cuando se hacen estas importanciones exageradas de plaguicidas que las matan y aún persisten serias deficiencias en el uso de plaguicidas en el campo, así como la importacion del algunos prohibidos en otros países por alto nivel de toxisidad y daño a los insectos.
Parece aquí que lo más importante es es regular la importación y el consumo de plaguicidas antes de declarar de interés público la apicultura.
Cabe destacar las últimas denuncias en Orotina y otras partes del país por muerte masivas de abejas.
Según estudios un 75 % de los cultivos alimentarios del mundo dependen en cierta medida de la polinización. Los polinizadores, como las abejas, mariposas, pájaros, polillas, escarabajos e incluso los murciélagos, ayudan a que las plantas se reproduzcan.
Sin embargo, la población de polinizadores –en especial abejas y mariposas– ha disminuido de manera preocupante, debido principalmente a prácticas agrícolas intensivas, cambios en el uso de la tierra, plaguicidas (incluidos los insecticidas neonicotinoides), especies exóticas invasoras, enfermedades, plagas y el cambio climático.
Importancia de las abejas
– Mejoran nuestras dietas al proporcionar alimentos ricos en micronutrientes. No todos nuestros cultivos alimentarios necesitan ser polinizados; por ejemplo, el arroz, el trigo y las papas sobrevivirían incluso si nuestros polinizadores no lo hicieran. Sin embargo, muchos de los alimentos muy nutritivos y ricos en micronutrientes -como las frutas, algunas hortalizas, semillas, frutos secos y aceites-, desaparecerían si no hubiera polinizadores. Sin polinizadores no tendríamos algunos de los alimentos que tanto nos gustan (¡y que necesitamos para estar bien nutridos!) como fresas, manzanas, arándanos, cerezas, almendras, cacao y café.
. ¡Nos dan miel! ¿Sabías que de las más de 20 000 especies de abejas solamente 7 producen miel? ¡Las abejas melíferas occidentales producen 1,6 millones de toneladas de miel cada año! Este maravilloso producto es un edulcorante natural que tiene también propiedades antibacterianas y antisépticas.
– Una sola abeja melífera suele visitar unas 7 000 flores al día, y se necesitan cuatro millones de visitas para producir un kilo de miel.
-Mejoran el sabor de nuestros alimentos. Las plantas polinizadas adecuadamente producen frutas y hortalizas más grandes, uniformes y sabrosas. Las plantas evalúan cuánto esfuerzo necesitan para producir una fruta o una hortaliza.
– Aumentan la producción de alimentos y la seguridad alimentaria. Un estudio realizado en varias explotaciones agrícolas pequeñas encontró que cuando la polinización se gestionó adecuadamente, el rendimiento agrícola aumentó de media un 24%.
— Mantienen la biodiversidad. La polinización es uno de los procesos más importantes de la naturaleza que contribuyen a la biodiversidad. Ayuda a producir una gran variedad de plantas, muchas de las cuales también son cultivos alimentarios.