Por escapulario se puede entender dos piezas asociadas a la Iglesia católica: una pieza de la vestimenta monacal o una pieza de devoción.
El escapulario monacal es una pieza de tela parte del hábito de algunas congregaciones religiosas católicas, masculinas y femeninas (carmelitas, trinitarios, mercedarios, dominicos, etc). Consiste en una tira con una abertura por donde se mete la cabeza y que cuelga sobre el pecho y la espalda, pendiente de los hombros (en latín, scapula) Es parte del traje de faena usado por los monjes benedictinos entre otros y es símbolo del yugo de Cristo.
El escapulario devocional se deriva del escapulario monacal pero es mucho más pequeño: son dos piezas de género unidas por dos largas bandas o cordones.
Los más conocidos son el de la Virgen del Carmen (marrón), de la Virgen de la Merced (blanco), de la Pasión (rojo), de la Inmaculada Concepción (azul), de la Trinidad (blanco), de la Virgen Dolorosa (negro) y de San José. Dieciocho escapularios han sido aprobados e indulgenciados por la Iglesia. Pretenden recordar a quienes los llevan los deberes e ideales de la orden correspondiente
En algunos casos, el uso del escapulario se acompaña de promesas como la protección de la condena eterna o algunos otros privilegios. Esas promesas se dan en un cuadro de revelaciones personales a miembros de la orden a partir de visiones. El catolicismo como enseñanza oficial deja la libertad a las personas de compartir o no los mensajes de aquellas visiones. Podría ser que algunos interpreten aquellas promesas en sentido del uso de los escapularios como talismanes, lo que no corresponde a la enseñanza oficial.
El más difundido de entre todos los escapularios es el de la Virgen del Carmen, que cuenta con el llamado privilegio sabatino: existe la tradición de que la Virgen, a los que mueran con el Santo Escapulario y expían en el Purgatorio sus culpas, con su intercesión hará que alcancen la patria celestial lo antes posible, o, a más tardar, el sábado siguiente a su muerte.
La Virgen del Carmen es Patrona del Mar, de las Fuerzas Armadas, de la Policía y del Ejército, pero en Colombia, es considerada la Patrona de los Conductores. Sin importar si se conduce un camión, autobús o automóvil, la Virgen del Carmen los protege, según la tradición católica.1
El escapulario del Carmen es una manifestación de la protección de la Madre de Dios a sus devotos. El 16 de julio 1251, la Virgen se apareció a San Simón Stock, y le dijo: «El que muera con él no padecerá el fuego eterno». El escapulario del Carmen es un sacramental.
Está autorizado el uso de una medalla en lugar del escapulario del Carmen, con tal de que por un lado lleve la imagen del Sagrado Corazón de Jesús y por el otro una de la Santísima Virgen: La imposición debe realizarse con Escapulario de tela. A pesar de ello, el mismo San Pío X, al conceder esta dispensa, recomendó el uso del Escapulario de tela. Este es más simbólico, por ser una expresión abreviada del hábito del Carmen.