INEC confirman efectos de alta demanda internacional de carne de res costarricense en inventario bovino

Costa Rica buscará diversificar sus mercados de exportación gracias a la NAMA Ganadería y su Política de Ganadería Sostenible.

Los resultados de la Encuesta Nacional Agropecuaria (ENA) recientemente emitida por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) indican que para el año 2022 la estimación del inventario de ganado fue de 1.509.011 animales.

 

El cambio en el inventario, de 112.716 cabezas, está relacionado con una aceleración en la producción nacional, derivada de una mayor demanda internacional. La cosecha de ganado pasó de 317 mil en 2016 a 404 mil cabezas en 2021, lo que representa un incremento de 27.4% entre ambos períodos. En general, el promedio de cosecha del 2000 al 2022 fue de 364 mil cabezas; entre el 2019 y el 2021 se tuvieron cosechas significativamente superiores al promedio, ubicadas entre las 387 mil y las 404 mil cabezas, por lo que el exceso de cosecha acumulada sobre el promedio en esos 3 años alcanza la cifra de 89 mil cabezas. Las cifras presentadas entran dentro del error estadístico contemplado por el INEC, por lo que plantea la posibilidad que el error de medición sea mayor que la caída descrita.

Esta aceleración en la cosecha viene derivada de una alta demanda internacional, particularmente de China. Costa Rica pasó de exportar 17 mil toneladas métricas anuales en 2016 a 33 mil toneladas métricas en 2021, registrando un incremento cercano al 100%.

Las autoridades del sector ganadero esperan que la desaceleración del mercado internacional fomente un incremento en el inventario próximamente, manteniendo cautela sobre lo que puede suceder en los próximos meses con aspectos climáticos como el Fenómeno de El Niño. La cosecha de enero a agosto de 2023 reporta una disminución de 6 mil animales, aproximadamente, y la proyección de cierre a final de año la ubica en torno a los 379 mil animales, situación que acerca la extracción al promedio de producción histórico del país, por lo que de mantener o mejorar los estándares reproductivos se dará, en los próximos años, un incremento en el hato nacional.

Los cambios tecnológicos que se han implementado en el sector tienen como resultado la intensificación sostenible del hato: más animales en la misma cantidad de área de pasturas. Si se compara con las cargas de 2000 a 2010, el rendimiento ha aumentado un 40%. Prácticas como el pastoreo racional (PR) los bancos forrajeros, fertirriego de purines y bioles aumentan la disponibilidad de forrajes en las fincas, por lo que una forma de optimizar el negocio es incrementando la cantidad de animales por hectárea.

El viceministro de Agricultura y Ganadería, Fernando Vargas Pérez destacó las características de la producción ganadera costarricense, entre ellas, que es una actividad carbono positiva (captura más de lo que emite), con altos estándares de bienestar animal, conserva el 18% del territorio nacional en bosques, cuenta con 1.0045.000 hectáreas de pasturas y más de 30 millones de árboles dispersos en fincas. “La forma sostenible de practicar la ganadería, además del avance en el proceso de trazabilidad nacional y vacunación contra brucelosis, va a permitir a Costa Rica diversificar en otros mercados de alto valor adquisitivo como lo es el mercado europeo, lo cual representará un mayor ingreso económico para nuestros productores nacionales#, indico el señor viceministro de Agricultura y Ganadería, Fernando Vargas Pérez.

Por su parte, Luis Diego Obando, director ejecutivo de la Corporación Ganadera, señala que el sector se mantiene a la expectativa sobre el impacto del fenómeno del Niño. “Estamos convencidos de que las prácticas que van a adoptar los ganaderos van a mitigar el efecto de la sequía y en un escenario positivo se podría esperar mantener estable el hato”, afirmó.